Muere José San Romualdo, hijo mayor de Silverio, y la dulzaina se tiñe de luto

Segovia amaneció ayer con la noticia de la muerte de José Julio San Romualdo, hijo mayor del popular Mariano San Romualdo Silverio. Un cáncer fulminante ha acabado con la vida de este célebre segoviano que heredó el don que su padre tenía para la música en general y la dulzaina en particular. José hubiera cumplido 72 años el próximo 15 de agosto, pero la vida, caprichosa, no le ha dejado continuar impartiendo su magisterio, y la Escuela de Dulzaina queda un poco huérfana de un hombre bueno y orgulloso de pertenecer a la estirpe de los Silverios, mítica referencia de la música folk segoviana.

Profesor de dulzaina y solfeo, José San Romualdo supo, al igual que todos sus hermanos, dar continuidad al legado de su padre, quien fuera profesor y director de la Escuela de Dulzaina, y a la muerte de este siguió con sus clases. De todos los hermanos, José era quizá quien mejor dominaba este instrumento, aunque también tocaba el piano de manera deliciosa. Hasta el pasado mes de diciembre, ejerció como profesor de la Escuela de Dulzaina, actividad que ya no pudo retomar tras las navidades. Como su padre y sus hermanos, José ha gozado en Segovia de gran estima y popularidad. De hecho, el Ayuntamiento de la capital les dedicó una calle en el barrio de La Albuera. Celador en el Hospital General durante años, estaba casado y era padre de cuatro hijos, también ligados a la música tradicional y la danza.

Muchos fueron los segovianos que ayer se acercaron a la capilla ardiente para dar su último adiós a José Julio San Romualdo, entre ellos gentes del mundo de la música y la cultura. El funeral se oficiará hoy, a partir de las 11:00 horas, en la iglesia parroquial de Santa Eulalia. Después, sus restos mortales se trasladarán al crematorio de Segovia, donde serán incinerados.