
El hotel y el aparcamiento de las Oblatas abrirán a mediados de julio
Eurostars termina de amueblar y equipar el establecimiento hotelero, aún pendiente de licencia
Miguel Ángel López
Viernes, 27 de junio 2014, 12:01
El aparcamiento del antiguo convento de las Oblatas, instalación complementaria del hotel Doña Juana que explotará la empresa Eurostars (de la cadena Hotusa), abrirá al público a mediados de julio, según el compromiso de la propiedad de realizar la apertura simultánea. Pendiente aún de la calificación, el hotel Doña Juana podría ser el primero de cinco estrellas de la ciudad, y solo falta que el Ayuntamiento de Segovia conceda la licencia de primer uso, probablemente en las próximas semanas, para que abra sus puertas, ya que Eurostars está terminando de amueblar las 74 habitaciones y el resto de las dependencias, y los técnicos municipales han revisado hace tiempo la adecuación de las obras al proyecto aprobado. En el edificio funciona desde hace casi un año el restaurante Villena, que obtuvo la licencia de primer uso en junio de 2013 y que explota la sociedad promotora, Hotel Doña Juana SL.
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Catorce años de un proyecto complejo
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El proyecto para rehabilitar el antiguo convento de las Oblatas y transformarlo en un hotel de lujo comenzó a gestarse hace más de 14 años, antes de que, en junio de 2000, el Ayuntamiento que presidía Ramón Escobar firmara un protocolo de colaboración que estableció la cesión de cerca de la mitad de las entonces 500 plazas que se contemplaban en el anteproyecto del aparcamiento para su gestión pública. La Comisión de Urbanismo autorizó el proyecto en enero de 2001.
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El proyecto de construcción del hotel obtuvo licencia de obras en enero de 2004, después de una larga tramitación que motivó a la sociedad promotora a reclamar una indemnización al Ayuntamiento por el retraso. Después siguieron diversas peripecias, como la paralización de las obras del edificio en 2005 al detectarse un exceso de excavación casi simultánea con la orden de parar la construcción del aparcamiento, o el fallo en una parte de las cimentaciones ocurrido al ceder el terreno excavado en la antigua huerta, que supuso otro parón temporal de las obras hasta su legalización al año siguiente. Después, en 2007, fue necesaria la aprobación de las modificaciones del proyecto, tanto del aparcamiento como del hotel. Y después se han sucedido las quejas de entidades como la Academia de la Historia o Amigos del Patrimonio sobre la reposición del jardín (sobre la cubierta del aparcamiento), entre otras vicisitudes.
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En fecha más reciente, hace menos de un año, la petición de licencia de apertura tuvo que superar un último escollo y alguna revisión más (del Ayuntamiento y de la Comisión de Patrimonio) sobre la adecuación de las obras al proyecto. Esta dificultad quedó solventada, Patrimonio autorizó la intervención consistente en «minimizar el aspecto visual de los muros emergentes correspondiente a la fachada del jardín», para lo que hubo que colocar una cobertura vegetal compuesta de especies trepadoras que ocultasen las dos ventanas de ventilación del aparcamiento.
En todo caso, la decisión de abrir al público ya no depende de muchos trámites administrativos, solo de que el hotel obtenga la licencia de primer uso y de la decisión consensuada de las empresas, por lo que todo apunta a que esta vez (ya se ha anunciado la apertura del aparcamiento en dos ocasiones distintas) ambos negocios estarán en funcionamiento el mes próximo, después de 14 años de gestación, de una inversión millonaria cuya cuantía los promotores no han querido desvelar y de algún que otro contratiempo en la ejecución de las obras.
El Ayuntamiento está muy interesado en que abra el aparcamiento para descongestionar el tráfico en el recinto amurallado y suplir la carencia de plazas de estacionamiento en superficie. Como indicó hace unos meses el ex alcalde Pedro Arahuetes, «aunque sea una dotación privada, el aparcamiento de uso público vendrá bien como desahogo» para el recinto amurallado.
454 plazas
El equipo de Gobierno espera poder contar cuanto antes con las 193 plazas en rotación de las Oblatas (cuya explotación corresponde a la empresa Setex Aparki SA, concesionaria del servicio de control de la ORA), de las 454 de que dispone el garaje. Otras 109 plazas fueron vendidas en su día a particulares, 15 plazas corresponden a la cesión al Ayuntamiento establecidas en el convenio con los promotores, otras 32 se las reservó la propiedad y el resto están asociadas a la gestión del hotel.
La concejala de Tráfico y Transporte, María José de Andrés, señala en declaraciones a El Norte que el aparcamiento tiene licencia de primer uso desde octubre de 2013 y aunque los promotores tuvieron previsto abrirlo al público la pasada Semana Santa, decidieron posponer la entrada en servicio para que coincidiera con la apertura del hotel.
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De Andrés advierte de que la instalación cuenta con todos los pronunciamientos favorables del Ayuntamiento y estima que si no está abierta aún es porque así lo han decidido los empresarios, al margen de que todavía falta por hacer la división horizontal del aparcamiento, algo que también esperan desde hace tiempo los propietarios privados que adquirieron plazas.
Este trámite implica la escritura pública de las plazas y tiene un coste de cerca de 300.000 euros, según comentan algunos de los compradores, que en las últimas semanas han presionado a los promotores para que aceleren la firma en la notaría y han sido informados de que «es cuestión de poco tiempo».
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No obstante, la división horizontal y el otorgamiento de las escrituras de las plazas es independiente de la apertura del aparcamiento, que puede realizarse en cualquier momento porque las instalaciones cuentan con todas las licencias. Es ya cuestión de pocas semanas.
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