Nava de Francia: Aprovechar la piedra natural para crear patrimonio

A falta de un patrimonio arquitectónico que mostrar o restos de lo que un día fue el patrimonio histórico, el Ayuntamiento de Nava de Francia, presidido por Julián González, ha decidido utilizar el material que tiene a mano, las piedras naturales que se reparten por todo el término municipal, para crear un museo al aire libre, un proyecto que iniciara en el año 2011 y que en los últimos meses del pasado año se vio ampliado con dos importantes actuaciones.

Dicho museo o parque de la piedra, como también es conocido, se encuentra en la entrada del municipio y poco a poco ha visto cómo se iba ampliando con diferentes figuras y representaciones realizadas con piedra natural por Alfredo Mateos y Jacinto San Venancio.

Las últimas actuaciones, que surgieron a iniciativa del primer edil, han sido la creación de dos grandes carteles en los que se pueden leer dos nombres muy conocidos. Por un lado, la denominación con la que popularmente se conoce al municipio en la Sierra de Francia, 'La Nava', y por otro, el nombre del área recreativa que atrae a numerosos visitantes cada año, 'La Mata', donde se encuentra ubicada dicha pieza.

Estas dos obras son muy similares y se han colocado sobre peanas, de piedra también, para llamar más la atención, dotándolas a la vez de iluminación artística.

De esta forma, se han convertido en un nuevo atractivo para este pueblo en el que la piedra tiene mucha importancia y en el que se ha descubierto, recientemente, el dolmen de La Morisca. Se trata de un túmulo circular de diez metros de diámetro y cincuenta centímetros de altura, que bien pudiera ser un sepulcro megalítico, y que está en la parte más alta del cerro.

Pero poco más se puede señalar en este pueblo, cuyas viviendas antiguas son en su mayor parte de una sola planta, y entre las que destaca, en el centro del municipio, la Plaza, con la Casa Consistorial a un lado, con la típica balconada de las viviendas serranas, y, al otro lado, la iglesia parroquial bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario, que es de estilo gótico y data del siglo XV, en la que llama especialmente la atención su espadaña.

La iglesia parroquial guarda en su interior las imágenes de la Virgen del Rosario y San Juan; además del Cristo y San Blas, protagonistas de las fiestas de este municipio.