Pareja de baile
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Joaquín Pérez Azaústre: «Delibes representa al escritor, pero también el tiempo en que aún era posible serlo así, en familia y plenamente»Joaquín Pérez Azaústre
Sábado, 12 de diciembre 2020, 08:45
Veo a Miguel Delibes terminando de escribir o corrigiendo 'Señora de rojo sobre fondo gris'. Puliendo cada imagen de la fotografía de Ángeles de Castro, porque en esa novela se convierte en pintor y tiene que hacer frente al lienzo en blanco tras perder a su esposa. Solo cambia de armas: se describe a sí mismo, y el bloqueo de palabras es un trazo de humo. En esa novela escribe que les bastaba mirarse para saberse, que el suyo era un silencio de alimento, con aquellas primeras horas de la tarde en que no ocurría nada, salvo el milagro natural de estar juntos. «Aquellas sobremesas sin palabra, aquellas miradas sin proyecto, sin esperar grandes cosas de la vida, eran sencillamente la felicidad».
Leí esa novela cuando se publicó, en 1991, con 15 años. Fue un impacto súbito: el autor de 'El camino', esa fiesta infantil de un pasado mágico, que habíamos devorado en el colegio, se enfrentaba a la muerte de su ser más querido y la escritura no podía salvarlo. Eso pensé entonces, pero volví a leerla años después. Confirmé que ese libro le bastaría a Delibes para tener su sitio, y además comprendí que la escritura puede también curarnos de nuestras asperezas y salvar el aliento de los días normales, con su ferocidad. Delibes representa al escritor, pero también el tiempo en que aún era posible serlo así, en familia y plenamente, si dabas con la adecuada pareja de baile. De eso habla esta novela, que es el testimonio de una unión convertida en el tronco de nuestra mejor literatura perdida.
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