Castilla y León anuncia mano dura en todas las inspecciones por la Covid-19, clubes de alterne incluidos

Las inspecciones para comprobar que se cumplen las medidas para evitar contagios de coronavirus van a ganar en «severidad». Incluidas las de los locales que tienen la prostitución como negocio bajo la apariencia de hostales, pensiones o salas de fiesta. Francisco Igea, vicepresidente y portavoz de la Junta, avisó de que los inspectores autonómicos recibirán la instrucción de aplicar mano dura, más rigor, en la inspecciones. También en las sanciones, cuando detecten incumplimientos.

El responsable de la Junta esgrimió para defender la seriedad de los controles las 1.034 revisiones que se han efectuado a todo tipo de negocios. Casi una de cada tres, 337, se han centrado en bares y restaurantes, otras 180 han revisado la situación de piscinas y 57 más han llevado las comprobaciones hasta mataderos. El vicepresidente enlazó el balance de las inspecciones con la polémica suscitada en la comunidad por la situación de prostíbulos y clubes de alterne y la exigencia del PSOE a la Junta para que los cierre por ser un foco de contagio con el riesgo añadida de la dificultad del rastreo de la clientela. Son unos 300 locales en Castilla y León.

Francisco Igea argumentó que la competencia de la Junta llega hasta esa labor de inspección estos negocios que no tienen licencia como clubes de alterne, sino para otras actividades que maquillan lo que realmente genera los ingresos, que es el pago por sexo. El portavoz, que compareció tras el Consejo de Gobierno de la Junta acompañado de la consejera de Familia e Igualdad, Isabel Blanco, añadió que la Junta activó durante el confinamiento la atención a las mujeres que ejercen la prostitución, prestando apoyo a más de 900.

Igea censuró con dureza a los socialistas por «el uso de las víctimas de uno de los peores negocios de este mundo para hacerse la foto y erosionar al gobierno de la comunidad autónoma». Señaló que la reivindicación del PSOE de Castilla y León, que llevará el miércoles al pleno de las Cortes una iniciativa instando a la Junta al cierre de prostíbulos, es «cínica» e «infamante», porque es el Gobierno central quien debe abolir la prostitución si eso es lo que persiguen.

El vicepresidente se preguntó si los socialistas van a presentan iniciativas similares en Aragón o Valencia, comunidades en las que gobierna el PSOE y que han respondido como Castilla y León ante esta demanda. Solo el País Vasco otorga licencias a establecimientos que recogen abiertamente que allí se desarrolla «una actividad recreativo-sexual», matizó.

El dirigente de Cs reclamó a la oposición que «abandone esta estrategia» y recordó que el PSOE ha llevado en los dos últimos programas electorales nacionales la abolición de la prostitución. «Si quieren abolirla, que legislen», concluyó el vicepresidente.