Un tercio de la cosecha de cereal se da ya por perdida

Los sindicatos agrarios coinciden en calificar la cosecha de este año en Castilla y León como «catastrófica», siendo posiblemente la peor de la última década, debido a la falta de agua en general, el calor intenso del mes de mayo y las heladas de hace diez días. En este sentido, el presidente regional de Asaja, Donaciano Dujo, señaló que la recogida de cereal este año estará «muy por debajo de la media de la Comunidad, que está en 6,5 millones de toneladas, y estamos cifrando en 4,1 millones en estos momentos», incluso, inferior a la del año pasado que ya fue «muy mala», explicó.

Desde la Alianza UPA-Coag, Julio López, consideró que «no nos atrevemos a hacer estimaciones porque cada día que pasa es peor», aunque «estamos en condiciones de asegurar que será una de las peores cosechas de los últimos años».

La pasada campaña la cosecha de cereales en Castilla y León, sin sumar la producción de maíz, superó los 5,3 millones de toneladas, un 6,8% inferior a la media de las últimas tres campañas, que alcanzó los 5,7 millones de toneladas. El coordinador regional de UCCL, Jesús Manuel González Palacín, anotó que hay muchas diferencias entre unas zonas y otras de la región, siendo el centro y el sur las más perjudicadas, aunque tampoco es igual la previsión en el mismo término municipal, donde, por ejemplo, «las tierras más arenosas son las que se han ido más deprisa».

Inseguridad

En el mismo sentido, López subrayó que «es una situación catastrófica en Ávila, gran parte de Salamanca, Zamora, Segovia y todo el sur de Valladolid, donde está perdida la cosecha». Asimismo, «tenemos una irregularidad muy grande en Tierra de Campos donde veremos qué se salva, y Burgos, la productora de cereal por excelencia, donde estamos viendo unos rendimientos muy bajos». Dujo también aseguró que «la peor provincia es Ávila que está por debajo de los 1.000 kilos por hectárea y un poco mejor Burgos, Soria, Palencia o León».

El secretario regional de UPA avanzó que «el problema es que, a las fechas que estamos, no hay muchas posibilidades de recuperación y es que teníamos muchas esperanzas en el trigo, porque es más tardío, y quizá si hubiese llovido, se podía haber rescatado algo, pero no tiene grano y están vacías las espigas». Esto ha provocado que en algunas zonas de Ávila y Salamanca los agricultores hayan decidido comenzar a seguir para aprovechar el menos el cultivo para forraje, ya que «al estar vacías las espigas de grano, prefieren recoger para empacar», afirmó López. Aún así, recordó que «la cosecha viene adelantada en torno a tres semanas y dentro de diez días se está segando en algunas zonas para intentar apañar lo poco que quede».

Asimismo, «si hablamos de pastos no hay ninguna posibilidad», explicó López. Un hecho en el que también coincidió el presidente regional de Asaja que expuso que «están muy mal, por lo tanto el sector ganadero se ve influido de forma importante y va a haber muy poca producción en los forrajes». Por lo tanto, «los ingresos de los agricultores vía venta de los productos que trabajamos pues van a ser muy escasos y no van a cubrir los costes en la mayoría de los casos», subrayó.

La mitad, sin asegurar

Los seguros pueden ser una parte de la solución para los agricultores de la región. Sin embargo, según los datos que maneja UPA, «de la superficie sembrada, es posible que no esté asegurado más del 52%, con lo cual, el resto no va a ser indemnizable», afirmó López, que se considera un «defensor» del seguro y más ahora que se empiezan a apreciar las consecuencias del cambio climático. No obstante, el secretario de UPA señaló que el problema son los precios de los cereales que, al ser tan bajos, «se trata de empezar a ahorrar costes de producción».

En la misma línea, se mostró González Palacín que afirmó «los seguros integrales cubren estas incidencias, pero hay bastante menos gente que lo ha hecho que en años anteriores». Exactamente, un 20% menos que en el año 2013 que fue el último que la Consejería de Agricultura lo subvencionó. «No ha apostado por los seguros y quizás es una de las mejores políticas de apoyo al sector en la comunidad».

El presidente de Asaja coincidió también en apuntar a los seguros como «la única herramienta que tenemos». Asimismo, incidió en que «no todo el terreno que tenemos en Castilla y León está asegurado y no lo está porque no se ha modificado en los últimos años, no existen los rendimientos necesarios en algunas comarcas y es muy caro». Dujo también insistió en que a esto se suma la eliminación de una subvención de 16 millones por parte de la Junta.