El plan de reestructuración de Bankia afectará al 30% del personal en Segovia

Bankia despejó hace poco más de un mes una de las incógnitas planteadas desde que fructificara aquel SIP (Sistema Institucional de Protección) encabezado por Caja Madrid. Su plan de reestructuración en la red comercial y financiera tenía traducción en lo que se refería a la repercusión sobre el entramado de oficinas, pero no aclaraba cuántos trabajadores iban a verse damnificados. La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri decidió que fueran 19 de las más de 70 sucursales distribuidas en la geografía segoviana las incluidas en la reordenación. El plazo que se dio la institución bancaria para hacer efectiva esta planificación era el próximo día 24. Así que la próxima semana la reestructuración será un hecho.

El anuncio que hizo Bankia incluía la supresión del entramado de las sucursales de Fuenterrebollo, Torrecaballeros y Zarzuela del Pinar ya que se ubican «muy cerca de un núcleo urbano que ya cuenta con oficina», explicaron fuentes de la empresa. Asimismo, se mantendrán los cajeros automáticos y se estudiará incorporarlos en las rutas de los llamados 'ofibuses'.

Bankia cuenta con esta pequeña flota de dos autobuses que actúan como unidades móviles para garantizar la mayor cobertura posible y un radio de acción suficiente dentro de la estrategia de reordenación abordada por la entidad.

En lo que respecta a la capital segoviana, hay tres cierres acordados y que fueron comunicados el pasado mes de abril por Bankia. Son las oficinas situadas en el centro comercial Luz de Castilla y la urbana 11 que corresponde a la ubicada en la calle Dámaso Alonso del barrio de Nueva Segovia. Ambas se suman al punto que ya estaba clausurado en las instalaciones del Hospital General. Además, hay que agregar la supresión de la sucursal de El Sotillo, urbanización perteneciente al término municipal de La Lastrilla, en el alfoz metropolitano. Cabe otro matiz en esta relación de cierres, y es que todas estas sucursales pertenecían a la disuelta actividad financiera que desarrollaba la extinta Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Segovia.

De esas 19 oficinas implicadas en los planes de reordenación, los responsables de Bankia también precisaron que tres se ven abocadas a desaparecer como consecuencia del «solapamiento» entre terminales de la antigua entidad segoviana y Caja Madrid. Así, son tres sucursales de ésta última marca integrada en Bankia las que también echan la verja. Son las emplazadas en La Granja, El Espinar y otra más situada en la calle José Zorrilla de la capital segoviana.

Por último, Bankia también informó del cierre «parcial» de nueve centros. Son los localizados en los términos municipales de Gomezserracín, Palazuelos de Eresma, Lastras de Cuéllar, Escalona del Prado, Villaverde de Íscar, Vallelado, Fuentesaúco, Navafría y Martín Muñoz de las Posadas. En estos casos la alternativa pasa por la conversión de una «oficina normal que pasa a ser ventanilla desplazada con horario limitado», explicaron fuentes bancarias. Esto quiere decir que Bankia no abandona del todo estas plazas, como sí ocurre con los casos citados de Fuenterrebollo, Torrecaballeros y Zarzuela del Pinar, sino que aboga por reducir las jornadas de apertura a uno, dos o tres días a la semana.

No llega al tope de 91 salidas

Una vez conocidas las oficinas señaladas en los planes de reordenación, quedaban por dilucidar los trabajadores que causarían baja. Bankia ha confirmado hoy los datos facilitados por sindicato SATE y que apuntan que el 30% de la plantilla se verá afectada por la reestructuración. En términos absolutos, son alrededor de 85 empleados en la provincia los que dejarán sus puestos de trabajo.

Representantes de Bankia ya habían anunciado que era harto improbable que se llegara al tope de 91 salidas y que todo dependía de las negociaciones emprendidas para favorecer las bajas voluntarias. En este sentido, el representante de SATE-Bankia en Segovia,José Ignacio Bernabé, ha lamentado el elevado porcentaje de salidas forzosas, que según la central sindical se sitúa en torno al 30% de las bajas que se producirán.

Por su parte, la entidad niega categóricamente este extremo y asegura que el porcentaje de despidos será «ínfimo ya que la inmensa mayoría de la plantilla afectada se ha acogido a la salida voluntaria de la empresa». Las condiciones acordadas para las personas afectadas en el plan de reestructuración contemplan la indemnización de 30 días por año por trabajado con un límite de 22 mensualidades, ha especificado el portavoz de SATE, que insiste en si «descontento» porque la reducción de personal es «excesiva», aunque no se haya llegado al tope de 91 salidas.

A los juzgados

Por otra parte, Bernabé ha confirmado que la organización, integrada en la Confederación Intersindical de Cajas, está recabando información para personarse como acusación popular en la causa abierta en la Audiencia Provincial contra los exdirectivos de Caja Segovia por las prejubilaciones y retribuciones percibidas. Hasta ahora, las denuncias se habían producido en un plano «interno» explica el representante de SATE y ahora se ha decidido «dar un paso más» y acudir a la justicia. Lo mismo que ha hecho esta misma central en otro proceso iniciado en la Audiencia Nacional contra los antiguos miembros del Consejo de Administración de Bankia..