Montes de Valsaín deja de cortar un tercio de su capacidad productiva de madera

En el año 2011 finalizó el estudio de la evolución de la vegetación de los montes de Valsaín desde 1956, y quedó clara «la progresiva evolución de la superficie arbolada». La cita corresponde a la 'Memoria Anual de Actividades' del Centro de Montes y Aserradero de Valsaín que corresponde al pasado ejercicio y que consta en la documentación de que dispone el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en su página web. Sobre este espacio natural se cierne la incertidumbre. Hay en el documento varios datos y una afirmación que resumen una de las actividades principales del centro:en 2011, el volumen de madera explotado en el monte de Matas y el monte Pinar asciende a 20.984 pies (árboles) y 23.244 metros cúbicos, y «esto supone por segundo año estar cortando solo dos tercios de la capacidad productiva del monte».

El pasado de los montes y pinares de Valsaín es un ejemplo de gestión sostenible que ha garantizado la pervivencia de las masas arboladas y los aprovechamientos forestales (y también que el municipio del Real Sitio de San Ildefonso haya sido declarado Reserva de la Biosfera), pero el futuro no está claro y el presente es un reflejo de la situación económica.

La crisis de la construcción ha acelerado la caída de las ventas de madera, que ya comenzó a reducirse en 2007; la madera de los pinos de Valsaín, apreciada para estructuras, muebles, marcos de puertas y ventanas y, la de menor calidad, para encofrados ya no tiene la salida de hace unos años, a pesar del marchamo de calidad de que goza.

La capacidad productiva máxima de los pinares es de alrededor de 320.000 metros cúbicos de madera en diez años, a razón de un objetivo de corta anual de 32.500 metros cúbicos, aunque en 2010 y 2011 el volumen de madera extraída ha sido cada año ligeramente superior a 23.000 metros cúbicos. No obstante, esta rebaja de la producción no ha supuesto un descenso muy acusado de la madera almacenada en el centro dependiente de Parques Nacionales.

Hay mucho stock sin vender de madera de primera, segunda y tercera categoría, a pesar de que la producción en rollo en el Aserradero se redujo de unos 28.000 metros cúbicos en 2010 a cerca de 9.500 metros cúbicos en 2011, según se desprende de las memorias anuales del centro publicadas en la web del ministerio, si bien en la de 2011 se concreta que «se destinó al Aserradero un volumen de 2.581 metros cúbicos para su transformación en la nueva instalación». Sin que se disponga de datos de todo el ejercicio, al haber sido medidos solo los de noviembre y diciembre, las ventas del último años fueron «escasas aunque mejores que en los años anteriores», con más de 600.000 metros cúbicos de las cuatro clases y unos dos millones de toneladas de otros materiales (recuellos, corteza, serrín o astillas).

Desde 1884

La realidad impone sus condiciones, y también las decisiones de los gobernantes. La histórica fábrica del Real Taller de Aserrío Mecánico, creada en 1884 bajo el patrocinio de la Casa Real para procesar la madera de Valsaín, ha echado el cierre el pasado 1 de julio. No hay información oficial sobre su futuro ni el de sus 53 trabajadores, que en su mayoría han pasado a engrosar desde este verano las cuadrillas que trabajan en los montes.

Tampoco comunicó el departamento que dirige el ministro Miguel Arias Cañete la decisión, si bien aseguró el pasado mes de agosto, en una carta remitida a los concejales del Partido Popular del Real Sitio, que el balance comercial de la serrería arrojaba unas pérdidas de 750.000 euros al año y que «las decisiones que se están tomando tienen como único objetivo asegurar la viabilidad futura de la actividad forestal en la zona, y con ello, garantizar el empleo».

Objetivo «ineludible»

Curiosamente, a pesar de que el alcalde del Real Sitio de San Ildefonso, José Luis Vázquez, y su equipo llevaban meses tratando de dialogar con los nuevos responsables ministeriales ante los rumores de cierre, la carta de Arias Cañete respondía a la inquietud de los concejales del PP, que le pidieron información conscientes de la importancia de los aprovechamientos forestales y el tratamiento de la madera para el municipio, y del impacto económico que supondría el cierre para un conjunto de empresas. De hecho, las memorias anuales del centro constatan esta impresión, ya que citan una repercusión de su actividad estimada en cerca de 200 puestos de trabajo indirectos.

El ministro informó también que para tomar «algunas decisiones» sin mencionar en concreto el cierre del Aserradero se habían tomado teniendo en cuenta «el objetivo ineludible de reducir el gasto público» y que en los Montes de Valsaín «la gestión de los últimos años, con cuantiosas pérdidas financiadas por el Estado, ha agravado la difícil situación». Miguel Arias añadió que «cerca de 30.000 metros cúbicos de madera ya cortada se encuentran apilados y deteriorándose día a día en el propio monte».

Lo que no parece haber tenido en cuenta el ministerio es la inversión realizada en el Aserradero tras el incendio de 2005, que solo en 2009, durante el mandato socialista, supuso un gasto de 2,8 millones de euros para adquirir la maquinaria que permitiera restablecer su funcionamiento, aunque algunas fuentes cifran la inversión total de los últimos años en más de 5 millones de euros, sumando los alrededor de 2,5 millones de euros de la rehabilitación del edificio. Nada se sabe, por otro lado, del proyecto de ubicar en las instalaciones un Museo de la Madera y Aserradero Histórico (cuya idea original data de finales de los años 80 del siglo pasado) para el que se dispuso en 2007 de un presupuesto de más de 700.000 euros.

El Aserradero de Valsaín cerró después del incendio de 2005 durante las obras de rehabilitación y reanudó en 2011 su actividad el año pasado con la nueva maquinaria instalada. Sus trabajadores siguen activos con otras labores, aunque con las últimas declaraciones de miembros del Gobierno sobre el adelgazamiento del empleo público su futuro es tan incierto como el de las instalaciones. Cabe la posibilidad de que, como ha ocurrido otras veces a lo largo de su historia a finales del siglo XIX y del XX, vuelva a abrir con una concesión y gestión privada...

En todo caso, sobre la otra gestión, la de los montes también pesa la incertidumbre tras la decisión del ministerio de ampliar la extensión del Parque Nacional del Guadarrama. Por fortuna para Valsaín, al menos tanto la consejera de Agricultura de Castilla y León, Silvia Clemente, como el alcalde del Real Sitio defienden con firmeza que queden fuera de los límites del parque nacional los espacios y zonas con usos tradicionales. Vázquez pedía hace unos días que la ley del Parque Nacional declare de forma expresa la compatibilidad o no de los aprovechamientos tradicionales. «Tenemos que ser muy responsables para no crear inquietud que genere zozobra o disensión en la sociedad», advirtió Vázquez.

350.000 personas visitan al año un espacio con una amplia gestión

La gestión del Centro Montes y Aserradero de Valsaín no se limita solo a la actividad forestal y de conservación de los montes. En su memoria hay una extensa relación de actividades, como el mantenimiento de todas las infraestructuras (cortafuegos, puentes, fuentes, depósitos, cerramientos...), la recogida de residuos (casi 47 toneladas por la empresa Eulen), las autorizaciones de rodajes de películas, anuncios, marchas o competiciones (una docena el año pasado) o el control de las áreas recreativas de Robledo, Los Asientos y Boca del Asno, y del acceso para uso público. La proximidad a Madrid facilita la afluencia de visitantes, sobre todo los fines de semana y en vacaciones, con una estimación anual de 350.000 personas.

El referente para el uso público es el Centro de Interpretación de Boca del Asno, que cuenta con cuatro trabajadores de la empresa pública Tragsa y que para la realización de rutas guiadas y hacer lbores de información en las áreas recreativas contrató el año pasado a seis guías. Por el centro pasaron cerca de 18.000 personas, dos mil más que en 2010, y 166 grupos, la mayoría de Madrid (87), Segovia (31) y Valladolid (27), por lo que sus responsables creen que es necesario difundir la oferta «para aumentar las visitas de personas que aun viviendo en Segovia desconocen el centro». Otras 2.240 personas realizaron visitas especiales al monte y en las rutas de primavera, verano y otoño un total de 1.940.

Otro área de gestión es la del Salto del Olvido, la pequeña central hidroeléctrica del Eresma que en 2011 produjo más de 2,6 millones de kilovatios y que a principios de año liquidó con el IDAE los pagos generados por su restauración y puesta en marcha en 1993.

Sería prolijo relatar todo. Pero no hay que olvidar las actuaciones de conservación y fomento de la biodiversidad, con el control y seguimiento de la poblaciones de águila imperial ibérica y buitre negro: en 2011 iniciaron la cría tres parejas de águila y sacaron adelante 5 pollos, y 59 de buitres y 59 pollos.

miguel ángel lópez

10.668 hectáreas en el Real Sitio de San Ildefonso

Los montes de Valsaín están en su totalidad en el municipio del Real Sitio de San Ildefonso y abarcan una superficie total de 10.668 hectáreas, 7.622 en el monte Pinar y 3.046 en el de Matas, ambos catalogados de utilidad pública; en el primero es hegemónico el pino silvestre, con más de cuatro millones de ejemplares, y en el segundo esta especie convive con el roble melojo. Los montes están divididos en zonas y cuarteles dedicados a la producción de madera, a la protección del suelo, el recreo, pastoreo y otros usos tradicionales sobre los que se asienta en gran medida economía del municipio. Estos bosques son los únicos de Castilla y León con la Certificación Forestal Sostenible (FSC).

En la actualidad son propiedad del Estado, adscritos al Organismo Autónomo Parques Nacionales del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que los gestiona a través del Centro Montes y Aserradero de Valsaín.

Las características del suelo, el clima y la situación, umbría y altitud de los montes de Valsaín son idóneos para que los pinos silvestres crezcan rectos, alcancen una altura de 40 metros y su madera tenga pocos defectos y nudos, con propiedades muy apreciadas respecto a las de otras especies.