Mucho jamón por cortar

ERES una jamona», decía un rijoso Bardem al paso de Penélope Cruz. «¿Y tú, un guarro!», le gritaba ella en la película 'Jamón, jamón'. ¿Una jamona y un guarro? No concibo una pareja que pueda tener más cosas en común. La chacinería es una ciencia cuasi exacta y ya sentenció entonces que estos dos estaban predestinados. Bigas Luna, que otra cosa no, pero ojo tiene bastante, lo vio desde el primer momento. Sin embargo, a ellos les ha llevado años convencerse a sí mismos de que hay atracciones fatales a las que es inútil (y sobre todo agotador) resistirse.

Primero, unas imágenes bastante oscuras, la verdad, tomadas en las calles de Nueva York, y ahora otras a pleno sol, conseguidas en las islas Maldivas y adquiridas por la revista '¿Hola!' al precio -dicen las malas lenguas- de 200.000 euros, demuestran que Penélope Cruz y Javier Bardem están juntos y enamorados... O, por lo menos, muy encaprichados el uno del otro. Por cierto, ya empieza a echarse de menos que algún enteradillo salga por ahí afirmando que todo esto forma parte de un montaje urdido por la productora de Woody Allen para promocionar mejor su próxima película en la que, casualmente, ellos dos son protagonistas.

Si nadie lo ha dicho aún es seguramente porque este 'affaire' resulta más verosímil que aquel otro con Tom Cruise. A las mujeres nos cuesta poco creer que a Pe le ponga Ja (porque está Ja-món). Y los hombres comprenden perfectamente que a Ja le ponga Pe. Tal vez lo difícil de entender es que hayan tardado tanto tiempo en decidirse. Hay quien afirma que es porque se han tirado casi quince años de morros... Mejor me lo ponen. Eso indica que lo suyo es una relación pasional. De ésas en las que sólo se puede estar de dos formas: o bien comiéndose a besos o sin mirarse a la cara. Así que estos dos tienen trabajo atrasado... Mucho jamón que cortar.