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mónica rico
Miércoles, 28 de septiembre 2016, 12:11
La Asociación Encierros de Cuéllar presentó la noche del pasado lunes una nueva edición, la cuarta, de su revista de los encierros, en la que se realiza un repaso gráfico y escrito de lo que fue el pasado ciclo de carreras celebrado este año del 28 de agosto al 1 de septiembre. Para ello se contó con el presidente de la agrupación, Jesús Salamanca, que quiso agradecer el esfuerzo realizado en el diseño y coordinación de la publicación, y la colaboración de casi una veintena de fotógrafos que han cedido sus imágenes para que la revista sea una realidad. El grueso de la presentación fue protagonizada por Pablo Quevedo, periodista y miembro de la asociación, que fue uno de los impulsores de la revista, hace ya cuatro años.
Quevedo realizó un recorrido por el nacimiento de la publicación, recordando lo duro de los comienzos con centenares de fotografías por seleccionar, la intensidad del trabajo y la gran acogida que tuvo aquel primer número, que se agotó a los pocos días de su salida, tras llegar a distintos puntos de España, desde donde fue demandada. También mostró su admiración a quienes hacen posible hoy en día la revista «que ha ido creciendo en calidad, en contenido, en diseño y en interés», según manifestó, señalando que se está dotando a Cuéllar y a su fiesta «de un instrumento que contribuye aún más a confirmar su prestigio nacional e internacional. Es un documento, un proyecto periodístico, que está a la altura de lo que exigen los encierros de toros más antiguos del mundo, ejemplo de pureza y autenticidad», aseguró.
Durante su intervención quiso destacar la defensa de los festejos populares y tradicionales en general y de los encierros en particular, «frente al ataque de aquellos que consideran esta fiesta como un espectáculo salvaje, irracional o medieval», recordando también las palabras del pregonero Luis Antunes en la apertura de las fiestas de este año en ese mismo sentido. Para Quevedo, la revista refleja valores que se deben ensalzar para defender «nuestra fiesta. En sus páginas podemos encontrar la admiración y el respeto hacia el toro, el auténtico protagonista, el elemento fundamental que hace posible la fiesta», añadió, señalando que la publicación es «un canto a la fiesta de los encierros, uno de los mejores embajadores que Cuéllar puede tener en todos los lugares a los que va a llegar y la mejor representación de que la intolerancia nunca se impondrá a la tradición y la identidad de un pueblo».
La publicación realiza un repaso de las pasadas fiestas de Cuéllar a través de imágenes, aunque también recoge los textos del informe que realiza cada día la Asociación Encierros de Cuéllar. En la revista se pueden ver instantáneas del pregón y de los cinco encierros en distintos puntos del recorrido, desde la salida de los corrales hasta la llegada a la plaza, pero también fotografías de lo se denomina el otro encierro, donde aparecen momentos que se viven en los previos de cada carrera, como son las sopas de ajo en la puerta de los corrales y el ambiente que allí viven espectadores y caballistas, las cientos de personas que se sitúan cada día en El Embudo para disfrutar del espectáculo, el aguardiente que se sirve también a primera hora de la mañana en las calles de la villa, el calentamiento y ritual previo de los corredores, el baile de la rueda o la plaza de toros durante las probadillas, una vez finalizado el rito. A ellas se suman distintas instantáneas que muestran el encierro desde puntos de vista diferentes a los que el público está acostumbrado. En esta ocasión llegan con fotografías desde el aire, a vista de pájaro, tal y como se denominan en la revista, y a caballo. Las páginas gráficas se completan con distintos momentos de la probadilla y de la tronadera fin de fiestas.
Aunque el grueso de la publicación son las fotografías, la revista también cuenta con distintas colaboraciones de Félix Blanco y Magaly Zapata, el pregón de las fiestas de este año, que pronunció el sociólogo Luis Manuel Antunes Capucha, una entrevista a Paco Alonso, alcalde de Cuéllar entre los años 1970 y 1972, que realiza un recorrido por sus recuerdos en lo que a la evolución de las fiestas y los encierros se refiere, y el acta de la reunión del jurado del trofeo a la mejor ganadería de los encierros, premio que recayó en los astados de El Sardinero-Ave María. Para finalizar se realiza un recorrido por las actividades que ha desarrollado la Asociación en los últimos meses.
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