López Novoa se jubila tras 43 años de dedicación a la ciencia

Compañeros de docencia y amigos asistieron ayer el homenaje que tributó el Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (Ibsal) al catedrático de Fisiología de la Usal, José Miguel López Novoa, con motivo de su jubilación. El acto académico, que se efectuó en el Edificio Dioscórides, permitió rememorar los 43 años de consagración del profesor López Novoa a las investigaciones médicas, de los que 26 los ha desarrollado en las aulas del Estudio salmantino.

López Novoa, tal como destacó el profesor de la Universidad de Alcalá de Henares, Diego Rodríguez Puyol, es el autor de 350 trabajos de investigación a lo largo de su dilatada trayectoria científica y ha dirigido otros 28 proyectos de investigación. Acumula 7.212 citas en prestigiosas revistas científicas y es el autor de 57 capítulos de diferentes libros, siendo también el artífice de siete patentes.

En unas declaraciones previas a los periodistas, López Novoa se mostró emocionado por ser del destinatario de un homenaje de estas características, sobre todo por el hecho de que «haya tanta gente que se haya acordado de mí». Expresó que, tras sus 43 años de «dedicación a la ciencia», afronta ahora un nuevo periplo vital encarnado por «un cambio de vida» propiciado por la jubilación, a la que se ha sumado de forma voluntaria, pese a que teóricamente aún podía continuar impartiendo clases más años al no haber alcanzado aún la edad marcada por la normativa para la jubilación. Además, se mostró convencido de que los grupos de investigación que ha encabezado y que continúan trabajando en la Usal «van a tener una mayor capacidad de desarrollo en el futuro».

La sesión académica contó también con las intervenciones de Carmelo Bernabéu Quirante, del Centro de Investigaciones Biológicas del CSIC madrileño, quien impartió la conferencia Endoglina a vista de pájaro, y Carlos Martínez Salgado, del Ibsal, que disertó con una conferencia titulada Dos décadas y media con José Miguel en Salamanca.