Una mujer muere al caer al vacío desde un séptimo piso cuando lijaba un techo

La tragedia volvió a planear ayer por la mañana en el barrio de Parquesol. Poco antes de la hora de comer, una mujer de 47 años fallecía tras precipitarse al vacío desde un séptimo piso del número 3 de la calla Adolfo Miaja de la Muela, a consecuencia de un desgraciado accidente doméstico. Las primeras hipótesis apuntan a que la víctima se encontraba encaramada bien a una silla o a una mesa o bien a una escalera para lijar el techo recién pintado de la habitación de su única hija con la ventana abierta. Por causas que se desconocen, debió de perder el equilibrio y se precipitó al vacío.

La mujer, trabajadora de Helios, tenía las manos manchadas de yeso y junto al cuerpo sin vida había una lija que cayó también por la ventana del séptimo piso.

Los gritos desgarradores de la mujer, Yolanda R. F., durante su caída libre hacia el suelo fueron escuchados por varios chavales que se encontraba en esos momentos en la parcela y por algunos vecinos que se hallaban en sus casas. Cuando sucedieron los hechos, la víctima permanecía sola en el domicilio porque su única hija, de 17 años, acabada de bajar a comprar el pan. De hecho, a su regreso fue cuando se enteró de lo sucedido a través de una amiga e, inmediatamente, rompía en un llanto desconsolado e interminable.

La fatalidad hizo que uno de los amigos de la joven fuera testigo presencial de la caída. Otra infeliz causalidad provocó que un joven de 21 años, vecino de la víctima, fuera el primero que se encontrara el cuerpo sin vida de Yolanda al salir del portal. Inmediatamente subió «desencajado» a su casa, según confirmaba su padre una hora más tarde. La conmoción se fue extendiendo entre familiares, amigos y vecinos de la mujer cuando iban conociendo el lamentable accidente.

Los Servicios de Emergencias de Castilla y León recibieron la primera llamada de alarma a las 13.43 horas y trasladaron una UVI móvil hasta el lugar de los hechos. Sin embargo, los facultativos no pudieron realizar otra cosa que certificar el fallecimiento de Yolanda R. F., vecina de una de las primeras torres que la Cooperativa San Cristóbal construyó en Parquesol. Inmediatamente, se personaron en el lugar agentes de la Policía Municipal y del Cuerpo Nacional de Policía.

Hacia las tres de la tarde la jueza de guardia ordenaba el levantamiento del cadáver y, posteriormente, el cuerpo sin vida de la mujer fue trasladado al Instituto Anatómico Forense. La familia recuperará hoy mismo sus restos mortales.

Tres mujeres

En las últimas semanas la tranquilidad habitual de Parquesol se ha visto alterado por diversos hechos luctuosos, que no tienen nada que ver entre ellos, pero que la casualidad ha querido hacer coincidir en poco tiempo y que han finalizado con tres mujeres muertas. Muy cerca de donde sucedió ayer el accidente, concretamente en el conocido como Parque de la Jota, el 28 de agosto pasado, un grupo de chicos hallaba el cadáver de otra vecina del barrio -F. L. R., de 47 años-, que había fallecido de asfixia por atragantamiento.

Por otra parte, el 12 de septiembre desaparecía de su residencia en Parquesol la joven de 22 años Ekimariq M. J. M., de nacionalidad española y origen nigeriano. Su cuerpo sin vida era encontrado el pasado domingo, 28 de septiembre, en una casa abandonada en Tariego de Cerrato, municipio palentino en donde tiene fijada la residencia la familia de un hombre que se declaró culpable de su muerte. El agresor -David A. S., de 29 años,- acaba de cumplir una condena de seis años en la prisión de Dueñas por tráfico de drogas.