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MIGUEL A. PINDADO
Domingo, 22 de mayo 2011, 03:37
No se cumplió ninguna de sus previsiones. Pastor quiere siempre ganar el último partido en casa y además ayer quería que su equipo jugase más con la cabeza que con el corazón. Al final el corazón no obró el milagro y encima el rival celebró en la cancha su pase a la Liga de Campeones.
«Hemos jugado los primeros veinte minutos casi sin defensa, luego hemos mejorado bastante tras el descanso, pero no ha habido mucha colaboración en la portería», intentaba explicar Juan Carlos Pastor. «Además no hemos tenido acierto de cara a la portería. Muchos postes, muchos lanzamientos fallados desde los seis metros. Creo que hemos hecho un buen partido en ataque, pero sin definir bien», lamentaba el técnico.
Sobre la última jugada, los casi treinta segundos desperdiciados para hacer un ataque en condiciones, Pastor comenzó que «hemos tenido opción al final, después de los tres penaltis parados por Sierra, pero no hemos sabido jugar. Debía haberla decidido Gurbindo, pero Cutura no se percató de que jugariamos con siete hombres de campo». A pesar de ello, el propio técnico reconoció que «hubiera sido demasiada suerte meter el último disparo».
Al final, la clasificación ha colocado al Cuatro Rayas quinto. «Aspirábamos a más, pero es complicado estar en todas las competiciones, intentar ser competitivos en todas ellas. En esta segunda vuelta hemos tenido que remar mucho. Ahora tendremos que ver qué es lo que nos toca con este quinto puesto». En este sentido Pastor se mostró partidario de disputar la Copa EHF porque «tiene más entidad y es más competitiva, aunque habrá que ver si el Granollers acaba por jugar la previa de la Champions o quizás podamos jugarla nosotros. De cualquier forma hay que mirar hacia adelante».
Havard y Bilbija
El noruego estaba triste. «Siempre quieres ganar por la afición, que es la mejor del mundo. Lo de la vuelta a hombros no me lo esperaba. ¡Solo faltó que me dieran una oreja¡». Para Havard Tvedten el mejor momento de sus tres años en Valladolid fue «ganar la Recopa de Europa». El noruego reconoce que «Valladolid la ha dado mucho deportivamente, pero no se considera una estrella porque aqui siempre hemos sido una familia y agradezco a los compañeros todo lo que han hecho para que yo brillase en el campo».
Por su parte, Bilbija se mostraba muy emocionado por abandonar Valladolid. «Desde luego este el peor momento de estos cuatro años en Valladolid, por la derrota, por ser con León y por ser en mi despedida. El mejor sin duda fue la Recopa. Agradezco a Valladolid, al club y a la afición lo bien que me han tratado estos cuatro años».
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