
MÓNICA RICO
Martes, 25 de enero 2011, 01:09
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El pasado mes de octubre, técnicos del Servicio Territorial de Cultura junto a miembros de la Oficina Técnica del Ayuntamiento de Cuéllar y la concejal delegada de Patrimonio, realizaron una visita de inspección a la iglesia de Santa María de la Cuesta de la villa y más en concreto a los contrafuertes del muro de delimitación del antiguo huerto, también denominados estribos.
En esta visita se comprobó que el estado del contrafuerte central es crítico, con peligro por desprendimiento, ya que en las caras laterales existen unos agrietamientos que provocan el giro y desplazamiento del elemento. También existen ya zonas desprendidas en una de las esquinas por falta de cohesión.
Con el fin de garantizar la seguridad tanto del inmueble como de las vías públicas y el objetivo de eliminar este peligro, se realizaron distintos informes para acometer obras para la consolidación urgente del contrafuerte central, teniendo en cuenta que se encuentra muy deformado y fracturado en su interior debido a tensiones excesivas. También existe un riesgo inminente de nuevos desprendimientos e incluso podría llegar a un derrumbamiento general, por lo que de forma inmediata se acometerán distintas obras.
En primer lugar se realizará un apeo provisional de la zona superior del estribo con perfiles metálicos, con el fin de evitar desmoronamientos que puedan causar daños a los operarios, que seguidamente tratarán de realizar la consolidación de la base del sillar de apoyo, por medio de inyecciones de mortero de cal hidráulica.
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También se llevará a cabo la reconstrucción en una esquina de los sillares y la mampostería desaparecidos y un cosido de las grietas exteriores e interiores en las tres caras del contrafuerte. Se ejecutará mediante barras de acero inoxidable de 1,20 metros de longitud, sobre una lechada de cal hidráulica pura previamente inyectada en taladros con diferentes ángulos de inclinación.
Desde la Concejalía de Patrimonio también se informó de que, aunque no se ha observado en los últimos tres años un avance apreciable en los desplazamientos o en los desplomes de los muros, sí existe un riesgo a medio plazo de que se vuelvan a producir nuevos movimientos. Por ello, con el fin de diagnosticar las causas que los producen, conocer su progresión y permitir la elaboración de un proyecto definitivo de estabilización del conjunto, se van a efectuar varios estudios urgentes. Entre ellos un análisis geotécnico, que, además, servirá para aclarar las causas de los desplazamientos y se espera que aporte los datos imprescindibles sobre las características del subsuelo, para calcular el anclaje de las bases al terreno mediante micropilotes, el anclaje en diagonal de los muros a una capa resistente del terreno y los drenajes a realizar.
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También se efectuarán diversas catas, unas de ellas sobre las grietas existentes para conocer las características de la fractura y otras sobre las bases de muros y estribos, para averiguar en qué condiciones se encuentran éstos apoyando sobre el terreno. Todas ellas contarán con un seguimiento arqueológico.
Por último se obtendrá una medición exacta del progreso de las defomaciones, desplazamientos y giros en muros o contrafuertes.
Las obras serán financiadas por la Junta de Castilla y León, con una aportación de 43.785,03 euros y el Obispado de Segovia, con 15.000 euros, mientras que el Ayuntamiento de Cuéllar correrá con los gastos de la Dirección facultativa.
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