El valor de una historia real
Pilar G. Almansa lleva a la escena la experiencia personal de Ana Garrido en ‘Yo destapé la Gürtel’
carlos álvaro
Segovia
Viernes, 16 de febrero 2018, 12:53
La Casa de la Lectura (biblioteca municipal) acogió ayer la lectura dramatizada de ‘Yo destapé la Gürtel’, embrión de un futuro montaje teatral basado en la experiencia de Ana Garrido, la funcionaria del Ayuntamiento de Boadilla del Monte que contribuyó a destapar uno de los mayores casos de corrupción de la España contemporánea, la tristemente célebre Gürtel. La dramaturga Pilar G. Almansa, autora de los textos, y la responsable de Cultura de la Fundación Internacional Baltasar Garzón, la también actriz Natalia Díaz, fueron las encargadas de realizar la lectura. ‘Yo destapé la Gürtel’ forma parte del proyecto internacional 365 WAY (365 mujeres al año), cuyo objetivo es la creación de un corpus teatral basado en historias femeninas reales.
«Estuve pensando en qué mujer podría inspirarme y, después de barajar varias opciones, vi a Ana en la tele y me decidí, teniendo en cuenta además que me interesa mucho lo que ha pasado en España durante los últimos años. Desde el punto de vista creativo, me parece interesante tomar el testimonio de mujeres reales para construir historias. Si queremos construir un canon, partamos de la realidad, de las mujeres reales», explica la dramaturga Pilar G. Almansa.
La experiencia de Ana Garrido como denunciante de un caso de corrupción ha inspirado una historia que aspira a convertirse en un montaje escénico. «Entrevisté a Ana Garrido para componer el texto, que está focalizado en su experiencia. El objetivo no es tanto explicar la trama Gürtel –lo cual sería muy complicado– como contar la experiencia que vive el denunciante de un caso de corrupción. Una de las cosas que Ana me decía es que en ningún momento pensaba que estaba destapando una trama de corrupción de semejante magnitud, solo que tenía un alcalde que era un ladrón. Lo que he hecho ha sido recoger la experiencia de ese ser humano que empieza a tirar de un hilo por algo que le parece una injusticia y reflejar cómo la injusticia se acaba volviendo contra él», señala Almansa. La experiencia de Ana Garrido tuvo varias fases. Cuando los que estaban metidos en la trama se percataron de que ella se había dado cuenta, empezaron a acosarla. Entonces dejó el trabajo y vivió en Costa Rica dos años. Cuando regresó, había otro alcalde en Boadilla y se reincorporó, pero el acoso continuó.
Mantener la cordura
«Es en ese momento cuando ella empieza a recoger pruebas del acoso laboral y llega a denunciar al propio Ayuntamiento de Boadilla. Al final deja el trabajo y le cambia la vida radicalmente», cuenta la dramaturga, que considera asombroso que Ana Garrido no se haya vuelto loca: «Es lo que más me llama la atención de esta mujer, que haya conseguido mantenerse cuerda. Ella era una persona normal, que hacía su trabajo y cumplía y que de repente se topó con eso, sin buscarlo. Lo pasó muy mal porque incluso recibió amenazas de muerte... El hecho de que haya sido capaz de mantenerse cuerda, intentando siempre mantener los pies en la tierra, es lo que más me ha llamado la atención de esta mujer».
Ana Garrido no pudo estar ayer en la lectura de los textos protagonizada por Pilar G. Almansa y Natalia Díaz, aunque conoce su contenido. «Son fragmentos. Estamos en la fase de construcción del propio texto –añade Pilar–, en fase de preproducción. Espero que llegue a convertirse en un montaje». Tras la lectura, se abrió un animado coloquio con el público que moderó la periodista de RTVE Mamen Vicente.
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