Segovia

Un barrio entero con Jesús Gómez, matancero del año

La avenida Vicente Aleixandre, en el barrio de Nueva Segovia, vuelve a revivir la tradicional fiesta popular de la matanza, organizada por el establecimiento La Churrería, regentado por la familia García Martín (Luis, Saúl y Jairo), que un año más traslada a la calle amplios mostradores, planchas, mesas de despiece y todo lo necesario para que los segovianos que lo deseen puedan participar en la degustación gratuita de la carne de tres guarros, 25 kilos de chorizos a la sidra y, cómo no, 15 litros de sopa castellana.

Sin embargo, el plato fuerte de la celebración tuvo lugar la noche del viernes, cuando se hizo entrega de una placa conmemorativa que acredita a Jesús Gómez Herrero como Matancero de Honor 2024, una distinción que los Amigos de La Churrería conceden a personas que destacan, sobre todo, por su condición humana y socio-cultural.

Y Jesús atesora humanidad, empatía, nobleza y saber estar en cada momento, además de su disponibilidad para implicarse en cualquier acto social que se desarrolle en este barrio. Y es que Gómez Herrero, a pesar de vivir en San Cristóbal, no hay día que no visite Nueva Segovia y departa con los parroquianos de La Churrería.

Al Matancero de Honor se le nota, y de qué forma, sus orígenes vecinales de San Lorenzo, barrio que le vio nacer y donde el tiempo parece haberse detenido, irradiando una curiosa paz urbana en cada rincón de su trazado medieval, bañado por las aguas torrenciales del Eresma, río que ha dibujado antojadizos espacios orográficos, y que también ha configurado el carácter de sus moradores: nobles, amantes de las tradiciones ancestrales y de la sencillez que se respira en un ambiente propio de las aldeas idílicas.

Lo cierto es que Jesús Gómez es un segoviano de toda la vida. Incluso prefirió estudiar en el desaparecido colegio universitario Domingo de Soto antes que desplazarse a Madrid. Tras licenciarse en Derecho emprendió una destacada carrera como funcionario de prisiones (que todavía mantiene), trabajando en San Sebastián, Zaragoza y Segovia, entre otros lugares. Gómez Herrero, que en junio cumplirá 65 años, es un amante de la Fórmula 1. Será por eso, por la velocidad, por lo que también es seguidor de la música de Van Morrison, 'El león de Belfast', o de Norah Jones. Está claro que sus preferencias musicales pasan por el blues y el jazz, lo que no le impide desarrollar una de sus aficiones, como es el bricolaje y cierta querencia por la piedra (de casta le viene al galgo), además de ser un ávido lector de novela negra y motero de toda a vida. En fin, el Matancero de Honor de este año es un tipo empático, amigo de todo aquel que quiera acercarse a su entorno. Tal vez, esta humanidad haya sido heredada de su madre, Veridiana Herrero, que con 91 años mantiene la frescura de antaño.

Padre de dos hijas, siempre estará allá donde la nobleza tenga cabida, sin olvidar, eso sí, a su compañera Inma, que se deshace en halagos, no sin recordarnos, desde el cariño, la cabezonería de nuestro protagonista, adquirida (puede) por su paso por tierras mañas. Jesús no dudaría ni un momento para echar mano de la archiconocida canción de Morrison 'Brown eyed girl', para dedicársela a su pareja: «And you my Brown eyed girl», o lo que es lo mismo: «Y tú, mi chica de ojos marrones».

• Temas
• Segovia