Javier Arranz recurre su expulsión «ilegal» del pleno del Ayuntamiento

«Con Javier Arranz no han podido Óscar Lopez ni Juan Luis Gordo ni Juan Cruz (Aragoneses) ni Beatriz Escudero, y no va a poder Clara Luquero», ha afirmado el concejal no adscrito del Ayuntamiento de Segovia, que en rueda de prensa anunció este miércoles el recurso contra la decisión de la alcaldesa de expulsarle en el último pleno y ha confirmado los presentados para impugnar los acuerdos de los plenos de enero y febrero.

Aseguró Arranz que tiene «las ideas claras», que no va a dejar el acta de concejal porque cuenta con el respaldo de una encuesta realizada en su página web, según la cual ha recibido 514 votos a favor de que siga, frente a 186 en contra y 94 no válidos, aunque no puede precisar si entre los que han opinado puede haber simpatizantes del PPo de otros partidos con otra intencionalidad.

«Sé que buena parte de mi familia ha votado, pero hay otra parte de ciudadanos que quieren que siga hasta el final del mandato», declaró. La encuesta que él considera «vinculante» supone que «los ciudadanos me han otrogado una nueva confianza», ha dicho, y ha sido controlada mediante algoritmos que discriminan los votos duplicados y las identificaciones falsas. Según dijo, extrapolando el resultado de la encuesta y viendo como funciona Internet, «serían tres o cuatro concejales» en unas elecciones.

Arranz afirmó que no va a pactar «absolutamente nada con ningún partido», que se considera «cartero de la ciudadanía» porque trata de llevar al Ayuntamiento propuestas que le llegan a su correo, y dijo que apoyará «todas las iniciativas ciudadanas que mejoren la ciudad y a todos los candidatos que merezcan mi respeto», pero no formará parte de ninguna candidatura en las próximas elecciones a pesar de que tiene ofertas: «Ayer rechacé la de un nuevo grupo político que me ha propuesto que encabece su lista».

Sí dijo estar dispuesto «a mediar con otros partidos» para formar posibles candidaturas, afines a su ideología «socialista progresista», pero aclaró que «no me voy a presentar al Ayuntamiento de Segovia» porque «quiero dedicarme a mi vida privada», además de porque «mi familia lo ha pasado mal» por «las vejaciones de todo tipo y los ataques» que ha sufrido durante sus diez años de actividad municipal.

Disculpas

El concejal reconoció que su actitud durante el pleno tampoco fue correcta sino «mejorable», y añadió que él es «responsable en parte de la situación», pese a que había una conducta «predeterminada» del equipo de Gobierno para provocarle. Pidió por eso disculpas a los ciudadanos, pero insistió en que también deberían disculparse la alcaldesa, el portavoz del PSOE, Javier Giráldez, el de IU Luis Peñalosa por haberle insultado «durante cinco horas» al llamarle tránsfuga, calificativo que, en su condición, no puede serle aplicado de acuerdo con el reglamento municipal, en el que queda claro que es un concejal no adscrito. Por contra, añadió que sí son «tránsfugas de libro» tanto Giráldez como Luquero.

«Indignado» y con apoyo en el reglamento, en el artículo 93, Arranz ha formulado un recurso contra la expulsión del pleno, pues entiende que Clara Luquero solo podría haberlo hecho si le hubiera llamado al orden tres veces en el debate del mismo punto del orden del día. A su juicio, la decisión es «ilegal en el fondo y en la forma», y lo que se deduce es que «la alcaldesa tiene un problema, que no sabe dirigir los plenos y ha entrado en una dinámica de surrealismo». Para el concejal, el Ayuntamiento es «una dictadura» que le trata «injustamente» y sin objetividad.