Cómo salir de España y no entrar en shock

No es ningún secreto que cada día es más necesario el inglés como idioma para comunicarnos con el resto del mundo -ya que en la mayoría de los países europeos además de la lengua oficial de cada uno se habla también este idioma-, ya sea a la hora de viajar, para el trabajo, o simplemente para que cuando un turista nos pregunte cómo se llega a la catedral de Salamanca sepamos responderle en un idioma neutro como es el inglés.

Muchos son los niños que se apuntan a clases particulares para enriquecerse aún más de este idioma, así como los jóvenes que se marchan al extranjero durante el periodo vacacional para hacer una inmersión total en la lengua anglosajona. Pero sin duda alguna, lo que cada día vemos más a nuestro alrededor son jóvenes, (titulados o no) que deciden emprender una vida nueva en el extranjero para aprender dicha lengua, y ¿quién sabe?, encontrar un trabajo acorde a sus estudios.

Judith Pelicano, trabajadora de Educación First, empresa dedicada a la contratación de viajes en el extranjero para aprender idiomas, nos cuenta cuáles son las mejores ciudades para ir a estudiar inglés. «Para los más pequeños, ciudades pequeñas, como por ejemplo Brighton o Torquay en el sur de Inglaterra» señala, pero si tenemos un buen nivel de inglés podemos elegir otro país, Irlanda, «ya que el acento irlandés es bastante diferente y cuesta más entenderlo». Si tenemos alguna duda entre alojarnos en una familia o en una residencia, la elección correcta es familia porque en las residencias «tendemos a juntarnos con personas de nuestra misma nacionalidad» explica Judith, por lo que se recomienda para una inmersión total el alojamiento en familia «para que cuando termine el día puedas poner en práctica lo que has aprendido en la academia». Un consejo que nos regala Judith, y seguramente sea el consejo que te puede dar cualquier persona que haya salido a aprender un idioma en el extranjero es que lo más importante a la hora de aprender inglés son «las ganas y no juntarse con españoles».

Lo necesario antes de irse

Si estás pensando en emigrar a Inglaterra y no sabes qué debes llevar, en estas páginas te lo contamos gracias a www.bristolenos.com, un portal web donde podrás encontrar toda la información necesaria sobre la vida en este país.

Una de las cosas importantísimas que debes hacer antes de ir es renovar el Pasaporte, DNI y el Carné de Conducir, ya que si tus documentos están a punto de caducar y no sabes el tiempo que vas a estar fuera de España, puede que éstos se caduquen una vez estés allí, lo cual sería un problema. Otra cosa necesaria para trabajar en Inglaterra en solicitar el National Insurance Number (NIN), que es el número de la Seguridad Social. Desde Bristoleños nos aconsejan que aunque puedes trabajar desde el primer día sin el NIN -puesto que desde el trabajo te suelen asignar uno para los primeros días- este número facilita mucho las cosas. Por ello, es conveniente solicitarlo antes de emigrar, ya sea a través de un amigo que esté allí o por teléfono. Si lo hacemos por teléfono debemos hacerlo con número oculto, porque si comprueban que es un número español puede que no nos den cita.

Antes de emigrar es necesario haber ahorrado, pues muchos han tenido que pedir un avión de vuelta a España al cabo de los días por no tener el suficiente dinero. Bristoleños nos recomienda ir con el dinero suficiente para pasar dos meses sin problemas, ya que siempre hay que dar fianzas para el piso, comprar cosas para el alojamiento, etc. Entre 600 y 700 libras es el precio que cuesta vivir más o menos al mes en Inglaterra. En cuanto al dinero en efectivo, no hace falta llevar demasiado. Para hacer el cambio de euros a libras podemos abrir una cuenta en un banco, transferirlo y hacer el cambio sin comisión con Transferwise. Si quieres saber cómo está el cambio oficial de Pounds a Euros, puedes verlo en el Centro de Divisas de Yahoo.

Saber venderse

Esta joven de 26 años vivió un mes y medio en Londres con el objetivo de aprender inglés a la vez que trabajaba. El problema con el que se encontró fue que al ir tan poco tiempo -sólo eran seis semanas- nadie la podía o quería contratar. Además, necesitaba un número de la seguridad social que no tenía y que con tan poco tiempo no podía conseguir, ya que conseguirlo puede durar varias semanas. A pesar de ello, Natalia encontró en dos días un puesto de voluntaria en una tienda de caridad donde trabajaba cuatro horas, eso sí, sin sueldo alguno. En su caso, no se inscribió en ninguna academia porque iba con la intención de aprender inglés en el trabajo y en el día a día. Respecto al currículum, nos cuenta que no tiene «absolutamente nada que ver» con el formato que se entrega en España. En Inglaterra, a diferencia de nuestro país, es muy importante explicar detalladamente en qué consistían los trabajos que se han realizado anteriomente, además, es necesario venderse un poco a la hora de entregarlos, se debe mostrar al encargado de realizar la entrevista que tenemos muchas ganas de trabajar y que nos gusta, «tú puedes tener experiencia en mil cosas pero si ellos en la entrevista ven que no tienes ganas no te cogen», matiza Natalia. Respecto al coste de la vida en Londres Natalia recuerda que por entonces se pagaba por la habitación alrededor de 220 libras al mes, gastos a parte; «recuerdo que una vez me pedí un zumo de naranja en un bar y me costó entre 3 y 4 libras, muy caro». Natalia nos cuenta como en un supermercado llamado Sainsbury hacían una rebaja a ciertos artículos a partir de las 8 de la tarde. Por último, nos aconseja que no nos juntemos con españoles y que si no entendemos algo nos hagamos entender intentando explicar la palabra que no sabemos con otras palabras.