Control de partido

El manchego dejó que el juego fluyera a pesar de que con ello cometió algunos errores en la señalización de las faltas. En el plano disciplinario fue equitativo y mostró las tarjetas en el momento preciso según la infracción cometida. La única duda pudo ser el color de la mostrada a Djené que rozó la expulsión. El getafense en un balón dividido que se adelantó Weissman tocó con los tacos el balón para posteriormente golpear en el tobillo elevado del pucelano. Díaz de Mera con buen criterio entendió que el impacto no tenía la suficiente fuerza al no pillarle de lleno y por supuesto no podía considerarla ocasión manifiesta de gol, al ser la falta muy lejana a la portería.

En la última jugada del partido los locales reclamaron un penalti por empujón de Luis Pérez a Mata. El colegiado interpretó de forma correcta que este era insuficiente y propio de una disputa aérea que ganó el lateral derecho.

El asistente uno tuvo un gran acierto en la concesión del gol visitante, al validar en directo la posición de Kike en el arranque de la jugada que por pocos centímetros era habilitado por Cabaco.