Mini pizzas con torta de Aranda

Desde luego que la pizza es una de las comidas rápidas más internacionales, que da libertad de variar sus ingredientes para adaptarlo a todos los gustos. También hay algunas innovaciones. En este caso, un mini formato para presentar en estilo tapa y, a la vez, hacer un guiño a un producto típico de la tierra.

En el bar Palo Santo de Aranda de Duero apuestan cada jueves por un formato de pizza que tiene como base unas mini tortas de Aranda. Se trata de un pan con Marca de Garantía, autorizada desde el año 2013, que presenta un formato plano y de color dorado, donde el aceite de oliva cobra protagonismo.

«Es muy fácil de hacer y es un aperitivo estupendo», explica Carlos Nieto, propietario del establecimiento. La base está hecha gracias a la torta de Aranda, «luego echamos el tomate, mejor casero, bien triturado, bien fritito con un poco de cebollita, con mucho cariño», prosigue.

Luego hay que elegir el ingrediente principal. En este caso, Carlos apuesta por dos propuestas, con jamón york o con atún. «Hago ese formato porque son los ingredientes que más gustan al público general, pero hay muchas más posibilidades... Mezclar más quesos utilizando chedar, optar por el bacon, por los champiñones... Lo que quiera cada uno», detalla.

Una vez elegido el ingrediente principal, se corona con mozzarela y se hornea a 220º durante diez minutos y… ¡Lista!

En este caso, se habla de la minipizza al tratarse de una tapa, pero en muchos hogares también es tradicional hacer pizzas familiares utilizando como base la torta de Aranda de tamaño normal. Mismo formato, pero a lo grande y con más ingredientes, tantos como gustos.