
«Ojalá esto sea el principio del final»
La inoculación de la vacuna en Palencia acerca a los mayores de 90 años a sus ilusiones, como pasear sin horas fijas o volver a clases de memoria
Rosario Duque sale de la carpa feliz, agarrada del brazo de su hija. Debajo de la mascarilla, una inmensa sonrisa y, tras el pinchazo del brazo, la posibilidad de un día a día mejor, sin miedos, ni restricciones. «Estoy encantada con que ya me hayan vacunado, esperemos poder recuperar la normalidad porque ya estoy cansada de esto», reconoce. «Ojalá sea el principio del final, de verdad que sí», añade.
Ángeles Herrero y Lucía Fernández acudieron juntas a la cita con Pfizer. Compañeras de clase, ayer lo eran para inocularse el virus y para «esperar la segunda dosis y que esto vaya pasando con un poco de esperanza ya», afirma Ángeles. «Hemos venido las primeras para que nos haga efecto rápido la vacuna», agrega con buen humor.
«Llevamos un año muy aburridas. Antes íbamos a cursos de memoria y de otras cosas y lo pasábamos muy bien», señala Lucía. «Yo, desde que ha comenzado todo esto, estoy más torpe porque salgo menos», se lamenta segundos después. La vida de todos sufrió un vuelco en marzo del año pasado y doce meses después continúa igual. «Me siento muy bien y ahora que tengamos éxito, pero sin efectos secundarios, que esos no los queremos paranada», concluye Lucía, que abandona la zona de vacunación del brazo de su amiga Ángeles, igual que llegaron.
Todos, según se van acercando, se sorprenden de la poca gente que hay y de lo rápido que va todo. Todos llegan nerviosos, muchos con su ropa elegante porque es un día muy importante para ellos y para todos. La luz al final del túnel. Puede que aún tenue, pero luz al fin y al cabo. «Yo solo espero que esto sea para bien, que podamos volver a salir a la calle con normalidad», reconoce Demetrio Fernández, que ayer tuvo que caminar demasiado porque no sonó el timbre del autobús y se pasó de parada. «Casi que podía haber venido andando», añade, con ironía. «Yo creo que esta vacuna algo hará, con todo lo que la han estudiado, yo creo que sí», concluye.
Vacunación en Palencia
«Estoy muy contenta, cómo no. A ver si arreglamos esto pronto», cuenta Rosario Martínez, que cumple 91 años la próxima semana. «Ojalá pueda pronto salir a pasear cuando yo quiera, que eso lo hecho mucho de menos», concluye, después de haberse inoculado la primera dosis de la Pfizer, el primer paso para poder volver a pasear con normalidad.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.