Encuentran ejemplares muertos de almejas de agua dulce en las hoces del río Riaza

Miembros de la Asociación Geográfica Ambiental, cuya actividad desarrolla en las provincias de Ávila y Segovia, encontraron el pasado fin de semana ejemplares muertos de almejas de agua dulce o náyades en las hoces del río Riaza en las inmediaciones de Montejo de la Vega de la Serrezuela.

Su investigación sirvió para confirmar la existencia de estos bivalvos en la zona, lo que fue posible al encontrarse sin agua un canal que discurre en paralelo al río Riaza sin agua. No obstante, señalan que precisamente el hecho de que el canal se encontrara seco, a consecuencia de labores de limpieza de su lecho, es lo que ha producido la muerte de las especies encontradas.

«El acontecimiento descrito podría haberse evitado fácilmente si, previamente, a las labores de limpieza, se hubiese procedido al muestreo y posterior rescate de estos animales», asegura la citada asociación.

Según dice, las almejas de agua dulce son relativamente abundantes en la zona a pesar la gran regresión que sufren en la mayoría de ríos españoles y castellano leoneses a consecuencia de la contaminación o la construcción de diferentes infraestructuras que originan variaciones de caudal en los cursos fluviales. «Este hecho motivado por falta de planificación es especialmente grave, al estar situado en un parque natural», añade.

Dependencia de los peces

Además, señala que las náyades dependen para su vida de los peces -los cuales también habrán muerto en este punto- al hospedarse sus gloquidios generados (larvas) en las agallas, aletas u opérculo de los peces, principalmente barbos.

Posteriormente los peces se verán ampliamente compensados y beneficiados, pues las náyades son unas excelentes filtradoras mejorando considerablemente la calidad de las aguas y en consecuencia todo el ecosistema del río.