Los técnicos estudian dos rutas para el minibús del casco histórico

Silencioso, con el leve zumbido de los motores eléctricos, el minibús que prestará servicio en la línea 9 de transporte urbano partió ayer de la plaza de Artillería hacia el Alcázar con el alcalde, varios concejales y un grupo de periodistas como primeros pasajeros. En este recorrido iba delante una moto de la Policía Local, y detrás los niños y padres que participaron con sus bicicletas en la marcha de la Semana Europea de la Movilidad.

El vehículo cuesta 230.000 euros y tiene una vida útil similar a la de otros autobuses convencionales, entre cinco y ocho años, aunque probablemente será necesario reemplazar las baterías cuando lleve cinco años circulando. El Ayuntamiento estima que la línea 9 podrá entrar en servicio en octubre o noviembre, aunque los técnicos todavía están estudiando el recorrido definitivo.

Este vehículo de fabricación italiana -de la marca Tecnobus, modelo Gulliver U520 ESP-, dotado de baterías recargables y carrozado en fibra de vidrio, es un minibús de 28 plazas (con ocho asientos, 19 de pie y una silla de ruedas) y «ecológico», pues, como destacó el alcalde, Pedro Arahuetes, es «respetuoso con el medio ambiente». Además, así responde al planteamiento del equipo de Gobierno de «proteger el casco histórico de cualquier agresión», ya que no produce humos y su utilización puede disuadir a los ciudadanos de moverse en sus coches particulares.

Itinerarios

Para lograr este objetivo será necesario que la ruta de esta nueva línea 9 sea el adecuado a la demanda. El primer itinerario previsto salía de la plaza de la Artillería y subía al recinto amurallado por San Juan para llegar a la Plaza Mayor por San Agustín, San Facundo, Serafín y Cronista Lecea. Desde la plaza continuaba por Marqués del Arco y Daoíz hasta el Alcázar, donde daba la vuelta en la plaza Reina Victoria Eugenia; luego subía por Velarde y Valdeláguila, pero este tramo ha sido descartado porque el minibús, de 2,58 metros de alto, cabía muy justo por el arco de La Claustra.

Pero Arahuetes comentó que ya ha sufrido una variación y que los técnicos estudian otras alternativas. La variación supone que, al salir del Alcázar, el minibús baje por la calle Pozo de las Nieves en dirección al Hospital de la Misericordia y, por Doctor Velasco, descienda hasta la glorieta del paseo de Santo Domingo de Guzmán situada junto a la Universidad SEK; desde allí se dirige hacia el Acueducto.

La alternativa también afecta a la salida del Alcázar, en este caso en dirección a la Ronda de Juan II para bajar hasta Sancti Spiritu, entrar por el barrio de San Millán y llegar hasta la avenida Fernández Ladreda, y de allí al Acueducto. También barajan los técnicos la posibilidad de alternar y «conjugar» los dos recorridos, comentó el alcalde. En el futuro, la línea se adptará a la demanda.