La presencia de ratas trepadoras ha obligado a acordonar un jardín de Parquesol en Valladolid. No es consciente de ello la dueña de un ... bodeguero que campa a sus anchas por la zona en la que se han implantado diferentes cebos con un biocida tóxico para humanos y mascotas. Desde la semana pasada, una parcela situada junto al parque del Reloj de este barrio vallisoletano vuelve a ser testigo de la presencia de esta especie. De pelaje más oscuro pero más pequeña que la de alcantarilla, la rata trepadora aparece en el lugar de manera periódica.
Publicidad
«La experiencia dice que es fácil que a pesar de esta medida pueda volver a pasar». Álvaro Conesa, vecino de Parquesol, recuerda que no es la primera vez que las ratas trepadoras obligan a acordonar una zona en el barrio para detener su expansión. «A corto plazo puede que sea eficaz pero a largo es más difícil poder saberlo», explica.
El jardín acotado se encuentra al lado de una zona peatonal llena de terrazas y de un parque infantil. El lugar es idóneo para que jueguen niños o para pasear a las mascotas. Por eso, se debe extremar la precaución para evitar posibles problemas provocados por la toxicidad de los raticidas implantados.
«En una zona tan transitada y donde hay tantos perros es conveniente tenerlo controlado», asevera Jorge Enrique Martínez, vecino de la zona baja de Parquesol que no conocía la situación. «No era consciente de ello, muy bien no se ha informado si los que vivimos aquí no lo sabíamos», añade. También es la opinión de Óscar Álvarez, cuya casa está más cerca del lugar pero que tampoco era consciente de la vuelta de las ratas trepadoras. «Primera noticia, no tenía ni idea» es su respuesta.
Publicidad
«Como han acotado una zona pequeña, puedo ir con mi perro por otro sitio», comenta Alba Herguedas mientras pasea con su mascota. Para ella, la medida adoptada no va a cambiar «mucho» la situación, que se vive de manera periódica en Parquesol. También se mueve en esa línea Lydia Rodríguez, que suele sacar todos los días a su chihuahua por este parque. «No sé si va a ser suficiente, las ratas se mueven y al final solo se está enfocando el problema en un pequeño lugar, lo cual no quita que puedan cruzar hasta otro jardín», asevera. Ella, que vive encima de la zona afectada, es otra de las vecinas que considera que no se ha informado correctamente a los residentes. «No puede ser que mi casa esté al lado y no me haya enterado», puntualiza.
Desde el Servicio de Salud Pública explicaron que durante dos semanas se realizarán controles periódicos en la zona para controlar el consumo de cebo y reponerlo. Además, avisan de que es casi imposible acabar con los roedores, pero las campañas periódicas en parques y alcantarillas sí ayudan a controlar la población.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.