«Decimos con la cabeza alta que somos de aquí»
Arizona Baby actuó en una Plaza Mayor que supo interpretar el indie-rock de los vallisoletanos y mostró su cariño al grupo
MARTA MARINERO
Jueves, 10 de septiembre 2015, 09:49
Que no vengan de fuera a decirnos lo que nos perdemos. Escuchad a grupos de pucela, no seamos paletos». Una y otra vez, Javier Vielba El Meister, cuando toca en solitario, recordó a Valladolid que la esfera pucelana «está efervescente». «No os quedéis fuera, que luego os sentís mal», dijo a los cientos de vallisoletanos, hipsters y no, más jóvenes que mayores, altos y bajos, que se reunieron en la Plaza Mayor para escuchar a uno de los grandes grupos de la ciudad con reconocimiento en el extranjero. «Muy cierto, muy cierto», se oía contestar.
Era Arizona Baby, y demostraron que el indie-rock tiene cabida en Valladolid. El público se volcó con ellos. Pedía palmas, ahí estaban. Pedía coros, ahí los tenía. Y si nos los pedía, también. Valladolid se siente más que orgulloso de un grupo que ha recorrido el planeta ondeando una bandera morada, una bandera de Valladolid. «Allá donde vamos, decimos con la cabeza bien alta que somos de aquí».
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Ángel Stanich lo da todo en el escenario
El comienzo fue algo frío. Cantaron en inglés, y eso no ayuda a que el ciudadano local pueda seguir la letra y hacer, aunque sea, como que se la sabe. Pero Vielba, el señor Marrón y el doctor Tosco supieron cómo meterse al público en el bolsillo del chaleco que tan común es verles llevar y que ayer faltó. Sus barbas, en cambio, no. Ahí estaban. La ruina de los barberos. Enfrente, personas de todo tipo, pero como era de esperar, la camisa de cuadros, barba y pipa de fumar no faltaban.
Con 'The truth' (La verdad), la mano de los vallisoletanos se alzó, y ya no bajó más que para dar aplausos cuando el líder fue sacando a figuras del mundo musical de la ciudad. Juan Izquierdo, de The Lizard Pants «uno de los grandes grupos de Valladolid» fue el primero. Con 22 años, Izquierdo parecía más que tranquilo. No era, en absoluto, su primer escenario. Poco después llegó Álex Izquierdo, bajista de Ángel Stanich, y en esta ocasión puso su voz al servicio de Arizona.
Javier Vielba cantó su último disco, 'Secret Fires' (Incendios secretos), pero lo alternó con canciones de discos anteriores, y con homenajes a los mineros con '16 toneladas', una versión de José Guardiola que a mitad de tema cambió al inglés.
Fue un concierto, decían algunos de los que se han pasado en verano en festivales, «muy parecido al de Sonorama».
Es un grupo adoptado por los Estados Unidos, donde se han desarrollado y adquirido nuevos sonidos. Pero ellos lo han dado la vuelta y mostrado desde el otro lado: «Los teatros hacen sus pruebas para ver si gusta, en Valladolid. Nosotros hemos estado los últimos cinco años por todo el mundo para estar hoy aquí. Sabemos que sois exigentes, Pucela. ¡Y se os quiere!». Valladolid también les quiere. Y lo demostraron ayer. Hasta con confeti.
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