La antigua gravera situada frente al nido de Pingüinos, al borde de la carretera de Rueda, entre el colegio Ave María y el cuartel, acoge ... desde el 25 de octubre un complejo hostelero (Selvático) de 11.000 metros cuadrados, y 500 de restaurante cerrado, impulsado por dos hosteleros locales y que ha creado 21 puestos de trabajo con miras al ocio familiar con juegos infantiles.
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«Era un proyecto que teníamos en mente desde el verano de 2019 y que ha costado sacar adelante con el tema de permisos y la pandemia, pero ya llevamos tres semanas abiertos y la verdad es que está funcionando muy bien», explica Adolfo Lorenzo, uno de los dos empresarios vallisoletanos, junto a Luis Llorente, que están detrás de la apertura de Selvático, un enorme recinto vallado que ofrecer una pradera con más de un centenar de mesas de terraza y un pabellón acristalado con cafetería y restaurante. A su lado, en el exterior, cuentan con una pista polideportiva y juegos infantiles.
«La idea es atraer a las familias, pero también ofrecer un servicio completo para todos los públicos», añade el hostelero. Selvático se asienta sobre una gravera que fue abandonada hace más de veinte años y cuenta con un recinto vallado de aparcamiento. «Aquí no había nada y hemos creado un restaurante que confiamos en que sea del agrado de los vallisoletanos», concluye uno de sus impulsores, un veterano del sector hostelero.
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