La cantera Río Pirón devuelve las primeras hectáreas de monte restaurado

Representantes municipales y de la cantera firmaron ayer el acta de entrega de los primeros terrenos que la empresa Arcillas y feldespatos Río Pirón S.A. devuelve al Ayuntamiento de Navas de Oro tras su explotación y total restauración. Por parte del Ayuntamiento acudió al acto de entrega su alcalde, Ladislao González. María Bragado lo hizo en representación del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Segovia, y José Luis Corbacho en nombre de Arcillas y Feldespatos Río Pirón S.A.

En 1996, la industria minera empezó su actividad extractiva en el monte público 'Pinar de Arriba, Abajo, Román y Garlitera', propiedad del Ayuntamiento de Navas de Oro, y gracias también a la autorización de ocupación de monte de utilidad pública tramitado ante la Junta de Castilla y León. En un primer momento esa autorización se hizo para un total de 75 hectáreas que la Dirección General del Medio Natural ampliaría en el 2005 hasta 287 hectáreas.

Las labores de restauración que en dicha explotación viene desarrollando Arcillas y feldespatos Río Pirón han permitido que ayer se pudieran devolver las primeras 12,37 hectáreas de terreno al Ayuntamiento peguero, como propietario del Monte de Utilidad Pública y con el visto bueno del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Segovia, que se ha encargado de comprobar que la madurez de los árboles plantados y la superficie ocupada por los mismos tiene la suficiente entidad como para poner fin a su ocupación.

Una mina

Aprincipios de la década de los ochenta, varias sociedades investigaron y evaluaron el yacimiento de arenas feldespáticas existente en las proximidades de Navas de Oro. Como consecuencia de este proceso se realizaron estudios técnicos, de mercado y económicos para determinar con la mayor precisión posible los parámetros de beneficio del yacimiento y posterior comercialización de los productos a obtener de su explotación industrial. Los resultados positivos de estos estudios propiciaron la definición del Proyecto 'Río Pirón' para la explotación del yacimiento, creándose en Segovia en 1987 para el inicio de su ejecución, la Sociedad mercantil Compañía Minera de Río Pirón.

La sociedad pasó por diferentes etapas hasta que en 1994, el Grupo Samca (Grupo de Empresas industriales y mineras con sede en la comunidad de Aragón) adquierió la totalidad de sus acciones, acometiendo desde entonces numerosas inversiones con vistas a aumentar los niveles de producción, mejorar los rendimientos de las operaciones, racionalizar y automatizar los procesos o implantar la dinámica de los procesos mineros de restauraciones sistemáticas de las zona explotadas, minimizando el impacto ambiental temporal creado por la propia actividad minera.

A finales del 2004, la compañía cambió de denominación social pasándose a llamar Arcillas y Feldespatos Río Pirón. A lo largo de la última década el proyecto inicial ha ganado tanto solvencia técnica como económica, logrando la estabilidad de más de 30 puestos de trabajo directos. Los productos obtenidos constituyen materias primas fundamentales para la elaboración del vidrio, azulejos, gres, sanitarios, filtros de depuración de aguas, instalaciones deportivas, piezas de porcelana y un largo etcétera, siendo comercializados tanto a nivel nacional como internacional.

En líneas generales, el proceso de restauración ha consistido en regenerar superficies afectadas por la explotación en varias etapas claramente diferenciadas. En un principio, hay una regeneración de superficies afectadas por la explotación con su propio mineral estéril. Posteriormente se extiende una capa de tierra vegetal sobre la superficie previamente regenerada y se siembran pinos en una malla real de 4 x 4 metros sobre la superficie anteriormente regenerada. El proceso implica la realización de hoyos, colocación de la planta, aditivación de nutrientes y colocación de cortezas de pino en el alcorque donde se ha plantado para evitar la formación de hierbas que impiden el crecimiento del pino. También se siembran especies herbáceas en el resto de la superficie regenerada para fijar perfectamente el suelo de tierra vegetal extendida. Por último, se instala una red de riego por goteo con control automático.