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maría callejo
Sábado, 2 de agosto 2014, 12:59
Las fiestas de El Salvador, barrio cargado de historia y solera a los pies del Acueducto y de la ciudad amurallada, han llegado el último día de julio para quedarse hasta este domingo 3 de agosto. Concursos y juegos para niños, campeonatos para todos los públicos, una paella popular y varios conciertos llenan la agenda de esta celebración. El presidente de la Asociación de Vecinos Justo y Pastor, Tiburcio de Lucas, afirmó que «ha sido un gran comienzo de fiestas y muy animado. Tanto niños como adultos llenaron las calles del barrio hasta más de las doce y media de la noche».
Con este éxito inicial, aún quedan muchas actividades. Entre lo más destacado está el campeonato de rana, que ya se ha convertido en un torneo tradicional en este barrio año tras año, y que los adultos se toman muy en serio. Evaristo Galán Borregón, socio de la asociación, ha sido elegido para pronunciar el pregón de inicio de fiestas.
De Lucas indicó que «todos los días de las fiestas son importantes, el viernes el pregón; el sábado la paella popular; y el domingo la misa, limonada y chocolate. Todos tienen algo especial».
La principal novedad en el programa de este año ha sido el concierto ofrecido por el maestro Juan Valero y la soprano Carmen Bocanegra, que interpretaron canciones populares de todos los tiempos. Por otra parte, el presidente de la asociación destaca que «la paella popular, como cada año, será cocinada por Julián, que se encarga siempre y le sale muy buena». La degustación será hoy, a las dos y media de la tarde, en la plaza del barrio.
Tiburcio de Lucas explicó que »el presupuesto con el que se ha contado este año para diseñar el programa de festejos ronda los 4.500 euros aproximadamente, entre la ayuda del Ayuntamiento de Segovia, las aportaciones de los 271 socios y los anunciantes».
Los socios de la entidad abonan seis euros al año, «aunque algunos, de forma voluntaria, aportan hasta 10 euros», señaló De Lucas, quien añadió que «esperamos que nos sobre algo de los fondos para poder organizar algún juego para los niños en la época navideña».
Antes de pronunciar el pregón, Evaristo Galán Borregón confesó sentir «una profunda responsabilidad por responder al reto» que se le ha planteado este año. Ha formado parte de la junta directiva de la asociación durante más de veinte años y espera que «estas fiestas se vivan de la mejor manera posible, que la gente pueda evadirse de sus problemas y divertirse».
Una vieja reivindicación
Pero en medio de tanta fiesta, también hay hueco para la reivindicación. «La Junta de Castilla y León ya dijo que tenía el dinero para el traslado de los alumnos del Ezequiel González al futuro instituto de San Lorenzo, pero no concretan una fecha», afirmó el presidente de la Asociación de Vecinos. Tiburcio de Lucas insistió también en la necesidad que tiene el colectivo vecinal de contar con un local para llevar a cabo sus actividades.
Según explicó, hace unos años el Ayuntamiento de la capital proporcionó a los vecinos un local donde reunirse detrás de los Misioneros. A pesar de que tenían que compartirlo con otros barrios, De Lucas indicó que «estábamos de acuerdo, pero no podíamos hacer frente a los gastos en calefacción, de los que el Ayuntamiento no respondía». Por ello, el presidente de la asociación insistió en que «la Junta y el Ayuntamiento deben pongan de acuerdo para que nuestra entidad pueda contar con un aula donde reunirse en el barrio».
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Óscar Beltrán de Otálora y Josemi Benítez (Gráficos)
Lourdes Pérez, Melchor Sáiz-Pardo, Sara I. Belled y Álex Sánchez
Cristina Cándido y José A. González
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