El MyWigo sigue dando ejemplo

Los prolegómenos del partido entre vallisoletanos y melillenses estuvieron marcados por la emoción que se desplegó en la pista, tanto por parte de los jugadores del primer equipo del MyWigo, que portaron cubres de entrenamiento con el número cinco del gran capitán a la espalda, como por parte del equipo Lalo García del club morado, que paseó por el parquet de la pista central del Polideportivo Pisuerga con una pancarta de apoyo al ex jugador, que este viernes cumplió 44 años.

Tras estos emocionantes momentos iniciales, arrancó el partido. Porfirio Fisac sacó de inicio al joven Daniel Manchón junto con Montañez, Pino, Lucas y Stobart. Fue Melilla el que abrió la lata con un triple de Adrián Laso primero y una canasta de Edu Gatell después, logrando un parcial de (0-5) de inicio. Por su parte, el MyWigo Valladolid se mostró especialmente fallón en ataque y le costó entrar en el partido. Fue Román Montañez el que desatascó a los morados con una canasta de dos (2-5). Pero eso no hizo que el MyWigo mejorara sus prestaciones. Además, la presión de los de Alcoba en defensa evitó que los de Fisac ampliaran sus números en el marcador. A casi tres minutos del final de cuarto, la rabia y la brega se reflejaron en un mate a canasta de Javi Lucas (6-8), que puso a los vallisoletanos a 2. Sin embargo, Porfi no lo veía claro y cuando Melilla dobló el marcador, (6-12), solicitó tiempo muerto. Pero la dinámica no cambió demasiado hasta que a 1:16 del final, Lucas encestó desde el 6.75 para poner el (9-14) y 5 abajo. El MyWigo se recompuso y otra canasta, de Uriz en este caso, puso el (11-15) con el que acabó el primer acto.

En el segundo cuarto, a pesar de que empezó encestando el MyWigo de la mano de Rakocevic, continuaba la falta de ritmo y de acierto en el grupo de Fisac. A pesar de ello, los morados seguían en el partido puesto que Melilla tampoco aprovechó su ventaja inicial de cuarto para irse en el marcador. Algo que vino bien a los locales, pues tras el acierto de Uriz en los tiros libres y los dos triples consecutivos de Rakocevic, el equipo morado se puso a solo un punto de distancia de su rival: (21-22), mediado el segundo cuarto. Además, a poco más de tres minutos para el descanso el MyWigo comenzó a recuperar su juego alegre y dinámico que le llevó a dar la vuelta al marcador tras una canasta de Stobart con asistencia de Pino (26-25). Los últimos minutos del segundo cuarto se convirtieron en un toma y daca con acierto de ambos conjuntos que llegaron al descanso igualados aunque con ventaja por la mínima para Valladolid (33-32).

El tercer periodo empezó bien para los intereses morados, con cinco puntos consecutivos conseguidos por Uriz y De la Fuente (37-32), que dieron aire al MyWigo. Melilla cada vez se fue poniendo más nervioso, algo que se veía también en las indicaciones de Alcoba desde el banquillo. Y es que la mejor versión de los morados en el día de hoy estaba por llegar: Montañez sumó otro triple y De la Fuente encestó de dos para poner el (44-35), lo que significaba un parcial de 11-3 en el tercer envite. Irremediablemente Alejandro Alcoba tuvo que pedir tiempo muerto para frenar al ciclón morado, pero no lo iba a tener fácil, pues en este cuarto ya se comenzó a ver al MyWigo al que estábamos acostumbrados, con alegría, garra, pelea y lucha en cada aro. Todos los jugadores morados contribuían hasta llegar al (50-37) que llevó, otra vez, al técnico rival a solicitar otro tiempo muerto. Pero los pucelanos siguieron luchando por cada balón y no bajaron un ápice su intensidad. Con esta dinámica se llegó a los instantes finales del tercer cuarto que acabó 11 arriba para Valladolid (55-44).

Los últimos diez minutos también arrancaron bien para los locales con una canasta de Stobart (57-44). A él le siguió Rakocevic, con dos canastas consecutivas de dos puntos, y Pino con un triple, logrando así los locales un parcial de 9-2, (64-46), y 18 puntos de ventaja para afrontar el tramo definitivo del partido en el que la decimosexta victoria de la temporada estaba más cerca. Además, para darle más emoción al partido, la grada se acordó del capitán, Lalo García, y mediado el último cuarto empezaron a corear su nombre. Del partido poco más que decir. El MyWigo ya se había hecho con el control del encuentro y seguía sumando poco a poco, pero de manera suficiente como para mantener la ventaja, que a falta de tres minutos era de 15 puntos (68-53). Sin embargo, Fisac no se fiaba y, tras un triple de Melilla que suponía el (68-56), pidió tiempo muerto para dar las instrucciones necesarias. Y es que a poco menos de dos minutos para la conclusión, los norteafricanos redujeron las diferencias a 10 puntos (68-58). Pero ahí estaban los hombres de Porfi, apoyados por los cantos y aplausos de la grada, para pelear y no dejarse alcanzar. A 50 segundos del final un nuevo triple de los de Alcoba dejó las diferencias en 9 puntos, (70-61), pero solo sirvió ya para maquillar los números que mostraba el electrónico, ya que la victoria por (72-63) se quedó en casa, en Pisuerga. El objetivo del factor cancha en los play off se ve ahora un poco más cerca desde el cuarto puesto de la clasificación.