Diez constructoras optan a rehabilitar el depósito de locomotoras y otras diez al traslado del arco de ladrillo

Diez empresas constructoras han presentado ofertas para hacerser cargl de la recuperación del viejo depósito de locomotoras ubicado en la Estación Campo Grande de Valladolid, mientras que otras diez optarán al estudio técnico sobre el estado actual y posibilidades de traslado del Arco de Ladrillo.

La apertura de las ofertas económicas tuvo lugar ayer estuvo presidida por Antonio Cabado, consejero delegado de la Sociedad Valladolid AltaVelocidad (VAV), formada por el Ministerio de Fomento a través de sus empresa Renfe y de Adif, la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento de Valladolid, instituciones que estuvieron también presentes, así como representantes de las constructoras que optaban al concurso.

Según la entidad pública, las primeras plicas abiertas fueron las del depósito de locomotoras, un elemento «emblemático» del patrimonio heredado, cuya preservación y recuperación constituyen uno de los focos protagonistas de la ordenación planteada para la nueva estructura de Valladolid. «Sin embargo, este magnífico edificio y su entorno presentan un estado de conservación cercano a la ruina, por lo que se hace imprescindible una intervención previa de consolidación que frene su deterioro», indicó Valladolid Alta Velocidad en un comunidado.

El proyecto afectará al depósito de locomotoras, plataformas giratorias, vías y fosos, al edificio que albergaba el dormitorio de maquinistas y a los depósitos de agua, y deberá ofrecer soluciones para la integración urbana del complejo. El estudio deberá estar concluido en seis meses desde que sea adjudicado. A lo largo de febrero y una vez analizadas las 20 propuestas, el Consejo de Administración de VAV procederá a adjudicar ambos estudios.