Claudio Infestas, Libino Iglesias y Miguel Casado, ayer al mediodía en una terraza de Villalpando. Gabriel Villamil

«Se echaba de menos tomar un vino; que reabran los bares es mejor que si te toca la lotería»

Eva Esteban

Villalpando

Martes, 12 de mayo 2020, 07:00

Lo primero que hicieron ayer Miguel Casado, Libino Iglesias y Claudio Infestas fue aprovechar su paseo mañanero para 'patrullar' las calles de Villalpando y comprobar si los bares de esta localidad zamorana reabrirían sus puertas en el primer día de la fase 1. Encontraron la respuesta en la Plaza Mayor. Allí, dos establecimientos subieron la persiana a primera hora después de dos meses de «muchos miedos e incertidumbres», aunque con la certeza de que regresarían antes o después porque «de algo hay que vivir». Sus propietarios aprovecharon el parón para prepararse para la nueva situación, por ejemplo con la adquisición de mamparas.

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«De aquí no nos mueven», coincidían estos tres hombres, copa de vino en mano y con el propietario del bar rellenándoles el cuenco de patatas fritas continuamente. «¡Ay lo que se echaba de menos el vinito!», exclamó Iglesias. «Sabe extraordinario; que reabran los bares es mejor que si te toca la lotería», añadió Infestas.

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