Reabiertos los cuatro carriles del viaducto de Arco de Ladrillo 67 días después
El paso luce un nuevo tramo de veinte metros de quitamiedos, más alto que el anterior, al quedar obsoletas las medidas de las protecciones
Los vehículos circulan desde hoy con normalidad por los cuatro carriles del viaducto de Arco de Ladrillo una vez finalizadas las tareas de colocación del ... tramo de veinte metros lineales del quitamiedos, que destrozó el conductor de un turismo después de colisionar contra otros dos vehículos el 14 de agosto. De manera que el paso elevado, construido a mediados del siglo XX y destinado a pasar por la piqueta para ser sustituido por un paso subterráneo, vuelve a asumir la circulación por sus cuatro carriles 67 días después del accidente que mantuvo cortado un carril en cada sentido.
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El paso elevado suma así su enésimo parche a la espera de su demolición y luce ahora un tramo de veinte metros de bionda reluciente y notablemente más alta que el resto en la parte superior del carril derecho que discurre hacia el centro. Otro tramo, al final del carril izquierdo de salida hacia el paseo del Arco de Ladrillo, luce una bionda idéntica, que fue sustituida años atrás.
El motivo de la falta de uniformidad del quitamiedos radica en la obsolescencia de la protección existente, mucho más baja que las actuales, al haber cambiado la normativa. La actual obliga a que dichas protecciones sean más altas que las anteriores. Y por eso se aprecia a simple vista la falta de unión entre los soportes y las barandillas tanto en el nuevo tramo como el anterior que fue sustituido. La banda lateral, eso sí, sí está unida a las antiguas.
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