WhatsApp, un bálsamo contra la covid en Torrelobatón
Un grupo con 200 participantes comparte esta herramienta que ayuda a sobrellevar la cuarentena a los vecinos del municipio. Ya hay más de un centenar de afectados.
Hace ya dos semanas que la situación del municipio de Torrelobatón es muy complicada. La mitad de su población está en cuarentena por coronavirus, mientras que la otra está autoconfinada por responsabilidad. Los últimos datos oficiales del alcance del brote corresponden al pasado 25 de agosto, cuando se apuntaban 42 contagios, una cifra que hoy queda muy lejana ya que los vecinos del municipio estiman que rondan el centenar. En vista de la gravedad del brote, los sanitarios del área de salud de Tordesillas, al que pertenece la población, se desplazaron hasta el consultorio médico torreño para realizar más de 400 pruebas PCR de covid-19. Los resultados, aunque no oficiales, son devastadores.
El pueblo está triste, vacío. Los bares están cerrados. También algunas tiendas. A muchos, el virus les ha tocado de cerca. Pero los torreños se han aferrado a una tabla de salvación durante estas difíciles semanas. Un grupo de WhatsApp se ha convertido en el bálsamo de los efectos de este brote de Torrelobatón. Un grupo que lleva por título 'Torre nunca falla', que cuenta con 200 participantes y que ha amortiguado el miedo de los habitantes de este pueblo autoconfinado. En él, todos van informando puntualmente de los resultados de sus PCR.
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Inma Vázquez es el alma mater de este grupo. Lo creó a principios de abril para entretener a sus paisanos durante el confinamiento. Nunca imaginó que ese grupo se volvería un canal informativo indispensable.
«Pensé que sería bonito estar unidos en la distancia y enseguida tuvo una gran aceptación. Siempre ha primado la participación y el respeto. Cuando empezó la desescalada y regresamos a la normalidad el grupo quedó parado. Ahora nos ha vuelto a unir. Todos publican ahí los resultados de las PCR, sus dudas y miedos y todos nos vamos apoyando. Me siento muy orgullosa de cómo está sobrellevando la gente de mi pueblo este grave problema. Si se hubieran ocultado los resultados, creo que todo hubiera sido mucho peor», dice Inma.
Su situación familiar estas últimas semanas es de «auténtica pesadilla». Acaba de enterrar a su abuelo y casi todos los suyos estaban en cuarentena. «Estaba muy delicado y ha fallecido en pleno brote. Fue muy duro que algunos de sus hijos y nietos no pudieran acudir a despedirle. No nos queda otra que aceptar la vida como viene y esperar a que esto pase, pero a nivel psicológico, la situación es triste», recalca.
Una de las primeras en compartir, a través de sus contactos de WhatsApp, el resultado positivo de su hija de 13 años fue Cristina Urueña. Su única intención con ello era romper la cadena de contagios.
«Trabajo en el sector sanitario con pacientes covid y sé lo contagioso que puede ser si no se ponen medios. En cuanto me enteré de que el padre de uno de los niños del grupo de mi hija era positivo, avisé a todos los niños para que se aislaran y en cuanto tuve conocimiento de que mi hija estaba contagiada, también lo comuniqué. Me parecía la manera más efectiva para que todo el mundo estuviera alerta. Son pequeños y se relacionan con mucha gente. No quería que nadie se me olvidara. Hemos sido tantos los afectados que no tiene sentido ocultar nada. A todos nos ha servido de gran apoyo y nos ha hecho sentirnos acompañados en esta situación tan difícil», señala Cristina.
Uno de los resultados más celebrados fue el que comunicó hace unos días Nieves Blanco. Su negativo fue una gran alegría para sus vecinos. Su sistema inmunitario está todavía muy débil tras el segundo trasplante de riñón que recibió el pasado 18 de abril. «Por una parte estaba tranquila porque no había tenido un contacto directo con ningún positivo, pero a la vez, sentía una gran angustia. Tomo una dosis alta de inmunodepresores. Si hubiera dado positivo, no sé cómo habría reaccionado mi cuerpo. El coronavirus es un gran riesgo para mí, que puede hacerme perder el riñón», dice esta torreña.
«Mi resultado ha tardado varios días y muchos de mis vecinos estaban muy pendientes de mí. Me he emocionado mucho al ver tantos mensajes alegrándose de que soy negativo. Me he sentido muy querida por todos. Cuando recibí el trasplante me enviaron al móvil un vídeo precioso hecho por todos para darme ánimos. Estaba yo sola en el hospital de Valdecilla y ver cómo tanta gente se acuerda de ti me ayudó a recuperarme. Me parece que hemos hecho muy bien siendo sinceros y hablando abiertamente de nuestros resultados», dice Nieves.
Que no decaiga
En la familia de Alberto Sandoval no hay casos positivos, sin embargo él ha sido uno de los que más ha contribuido para que el ánimo no decaiga en el grupo. «Es en estos momentos difíciles cuando más aflora el compañerismo. La tecnología nos ha ayudado a estar unidos ante la desgracia y ha sido vital compartir los resultados para atajar la situación. Como vecino, siento que ha faltado información desde las instituciones y que sólo gracias al grupo de whatsapp hemos sido realmente conscientes de la magnitud del brote. Hay aproximadamente un centenar de personas afectadas y lo sabemos porque la gente ha sido generosa y lo ha compartido, no porque las instituciones nos lo hayan dicho. Es muy triste», lamenta.
Mónica Lorenzo escribió hace unos días a sus paisanos un mensaje esperanzador. Toda su familia era negativa, a la vez que mandaba «mucha fuerza y ánimos a los positivos». «Soy muy reticente a participar de grupos de whatsapp muy numerosos, pero durante el confinamiento éste me proporcionó cercanía con la gente, alegría y entretenimiento. En estas últimas semanas tan difíciles para el pueblo con el brote de covid, me ha emocionado mucho la solidaridad y la unidad de todos los vecinos, que han comunicado, sin ningún tipo de reparo, el resultado de sus pruebas. Creo firmemente que con ello se ha ayudado a evitar aún más la propagación del virus y eso me hace sentirme muy orgullosa de mi pueblo», resume
Varios familiares de Javier Puerta están guardando cuarentena. Él agradece los muchos gestos de buena vecindad que se han visto en el grupo 'Torre nunca falla'. «Que haya tantos positivos no significa que en Torrelobatón lo hayamos hecho peor que en otros pueblos. Lo que ocurre es que gracias al cribado masivo, en el que se hicieron más de 400 PCR y a otras más de 100 que se habían hecho anteriormente, han salido a la luz tantos casos de asintomáticos. Ha sido muy generoso por parte de los vecinos compartir sus resultados y ha ayudado a facilitar el trabajo de los rastreadores ya que muchos se han dado cuenta de que habían tenido contactos directos con gente positiva. Compartir los síntomas que cada uno tenía ha hecho que fuéramos perdiendo el miedo», remata este torreño.
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