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Estado en el que quedó el salón de la vivienda donde se originó el incendio. S. A.

Muere un hombre de 61 años con discapacidad que vivía solo al arder el salón de su vivienda en Arroyo

El cuerpo de Miguel, que «apenas salía desde que se rompió la cadera hace un año», fue encontrado en el pasillo de su piso de la calle Alonso de Ojeda

J. Sanz

Valladolid

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Domingo, 5 de julio 2020, 02:38

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«Miguel apenas se movía, tenía la mitad del cuerpo paralizado y desde hace un año tenía aún más reducida la movilidad después de que sufriera una caída y tuviera que ser rescatado por los Bomberos», relataban ayer apenados los vecinos del hombre de 61 años, Miguel A. N. V., que perdió la vida de madrugada al declararse un incendio en el salón de su vivienda, en un primer piso (el A) del número 1 bis de la calle Alonso de Ojeda, en Arroyo de la Encomienda. El fuego, según todos los indicios accidental, sorprendió a la víctima en su domicilio, del que «apenas salía en los últimos meses», y pudo intentar salir. No lo logró. Su cuerpo sin vida fue encontrado por los Bomberos tendido en el pasillo cuando la vivienda aún estaba «llena de humo» y el fuego consumía el mobiliario del salón.

El incendio fue detectado por el vecino de arriba instantes después de la una de la mañana y los efectivos del Servicio de Extinción tuvieron que acceder con la escala por una ventana situada junto al salón, que mira a la calle Diego de Almagro (al borde de la VA-30), ante la imposibilidad de abrir la puerta blindada y cerrada por dentro. «Nos dijeron que cerráramos las ventanas mientras ellos intentaban abrir la puerta a mazazos, pero no lo consiguieron y acabaron entrando por la ventana de una habitación», explicaron los testigos, que aclararon que el edificio de tres alturas, y doce viviendas, no tuvo que ser desalojado, si bien algunos vecinos salieron al ver el humo.

Los Bomberos, una vez dentro, se encontraron con «abundante humo», si bien emplearon menos de dos horas en sofocar las llamas y ventilar la vivienda una vez rescatado el cuerpo de la víctima. «Miguel vivía solo, tenía la movilidad muy reducida y recibía ayuda a domicilio, pero estaba mal y apenas se podía mover», reiteraron los vecinos, quienes recordaron que los propios bomberos ya tuvieron que auxiliarle accediendo por la ventana hace un año. Entonces se rompió la cadera y «apenas salía ya». La intervención se prolongó hasta pasadas las tres de la mañana y el resto de los vecinos pudieron regresar a sus casas con normalidad, ya que las zonas comunes del bloque no se vieron afectadas.

«Tenía la movilidad muy reducida y recibía ayuda a domicilio, pero estaba mal y apenas se podía mover», lamentan los vecinos

El cuerpo de la víctima fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para la práctica de la autopsia y el escenario fue inspeccionado ayer mismo por los especialistas de la Guardia Civil para determinar el origen. «Miguel fumaba mucho y quizás algo haya podido pasar», apuntaron los vecinos antes de lamentar su pérdida. El hombre vivía solo de alquiler en la vivienda desde hacía «un par de años».

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