La elección del portavoz en la Diputación de Valladolid provoca una nueva crisis en el PSOE

La «idea» inicial, tal y como confirmó en su día el portavoz adjunto primero del PSOE en la institución, Pedro Pablo Santamaría, era dejar «cerrada» la nueva organización antes de que finalizase el mes de agosto y planificar el curso político de cara al pleno del 6 de septiembre, en el que se oficializará la dimisión de López. La votación para designar a su sucesor, que tuvo lugar este martes por la mañana, no fracasó, pero de ella no salió ningún vencedor claro. Un «error» en el voto de la alcaldesa de Rueda, Dolores Mayo, que comenzó este martes mismo a desempeñar, aunque no oficialmente, las tareas de diputada como sustituta de Teresa López, lo truncó. También dejó en evidencia la división existente entre los diez diputados socialistas.

Martes 27 de agosto. A las nueve y media de la mañana comenzaron a llegar los diputados a los despachos asignados al partido en la sede de la Diputación provincial. El goteo fue constante hasta unos minutos antes de las diez, cuando, con casi media hora de retraso, empezó la reunión. El procedimiento a seguir era «simple» y, a priori, rápido: quien quisiera postularse para reemplazar a López podía hacerlo. Tan solo el concejal de Simancas Francisco Ferreira anticipó su candidatura. El alcalde de Alaejos, Carlos Mangas, también decidió presentarse.

Antes de que los representantes introdujeran su voto –secreto– en las urnas, la exportavoz y secretaria general del PSOE vallisoletano pidió la palabra. Ella insistió en que dijo «cuatro cosas», pero diversas fuentes explicaron que dio «algunas razones y explicaciones sobre a quién se debería votar». Su propuesta era Francisco Ferreira. Asimismo, les solicitó «lealtad por haber ido en su lista», algo que no sentó nada bien a los presentes. Sin embargo, la elección continuó y el regidor de Alaejos logró imponerse por seis votos frente a los cuatro obtenidos por el edil de Simancas. Levantaron la sesión, fueron «todos juntos» a un bar cercano para celebrarlo, y apenas diez minutos después dieron la voz de alarma:«ha habido un problema en la votación y tenemos que subir al despacho a solucionarlo».

La alcaldesa de Rueda se había «confundido». Otorgó su voto a Mangas cuando, según confirmó, quería apoyar a Ferreira. «Era algo que tenía muy claro. Ha sido un error, estaba con el móvil y me distraje», subrayó la regidora. Aceptaron esa equivocación, que empataba los resultados a cinco, por lo que será la Ejecutiva provincial la que tenga la última palabra, la que valore y decida quién debe ser el nuevo portavoz, la persona que desempeñe un cargo que tiene una retribución económica de 60.348,28 euros. Fuentes del partido aseguraron estar «totalmente en contra» de este procedimiento, que calificaron como «vergonzoso». «Somos el hazmerreír. ¿Por qué nos convocan para que votemos si luego lo va a decidir la Ejecutiva?», se cuestionaron. «Puede ser que haya sido un error, no algo malintencionado, pero hay que aceptarlo y ya está», continuaron.

Por el momento se desconoce cuándo se celebrará la asamblea, pero Mangas lo da «por perdido». Está «disgustado» por la situación, pero emplaza a sus compañeros a que voten «lo que crean más oportuno». «Ha habido una votación ganada por seis a cuatro. Se baja a tomar café y a los diez minutos sube una compañera a decir que se había equivocado. Cada uno que saque sus propias conclusiones», contó. «Se han dado una serie de circunstancias que yo creo que no entran dentro de la democracia», prosiguió el regidor, quien indicó que se presentó al proceso «porque creía que tenía el derecho legítimo a hacerlo». «No voy a impugnar nada, que decida la Ejecutiva», concluyó. Francisco Ferreira, por su parte, declinó pronunciarse al respecto.