Derriba una farola con un coche robado y deja sin luz la travesía de Pedrajas

El golpe ocurrió al filo de las cuatro de la mañana en la travesía de la Cl-602 y el turismo robado acabó con el lateral izquierdo destrozado y una rueda reventada después de impactar y derribar una farola. Una ambulancia que pasaba por el lugar atendió inicialmente al conductor, un hombre de 31 años, antes de ser evacuado al hospital con lesiones, en principio, de carácter leve y en calidad de detenido, ya que la ambulancia fue escoltada por una patrulla de la Guardia Civil una vez constatado que el vehículo era robado.

El propietario del Seat Ibiza, un vecino de La Seca, se enteró del robo casi en el momento, en torno a las tres y media, cuando escuchó el sonido del motor y un coche alejarse. Poco después recibió la llamada de la Guardia Civil para informarle de que el vehículo, que contenía numerosas herramientas, que han podido ser recuperadas, había sido localizado y el presunto autor estaba detenido.

Lo singular del robo es que el delincuente -se desconoce si actuó con más compinches-, con domicilio en Cuéllar y en cuyo historial figuran decenas de antecedentes, acudió según todos los indicios con su propio turismo a La Seca y lo dejó allí estacionado. Se trata de un BMW que fue localizado este mismo viernes por la tarde aparcado en dicha localidad, según han confirmado fuentes de la investigación.

El autor, o autores, del robo del Seat Ibiza intentaron, al parecer, sustraer minutos antes otro turismo en las calles de La Seca, que amaneció con las lunas rutas, si bien en esa ocasión no pudieron arrancarlo. Con el Seat Ibiza sí lo lograron y su conductor cubrió los cerca de cuarenta kilómetros que separan La Seca de Pedrajas (en una ruta que conduce a Cuéllar) antes de estamparse contra una farola.