Nueve de cada diez vallisoletanos adaptarían sus hábitos para combatir el cambio climático

El estudio forma parte de un documento elaborado por la consultora Geocyl, en colaboración con el centro tecnológico Cartif y dentro del proyecto europeo Ciudades Verdes Cencyl, financiado con fondos Feder. El informe fue publicado a finales del año pasado y concluye que el 89% de los encuestados manifiesta «estar a favor de ese cambio de hábitos, con una modificación de sus comportamientos en el día a día».

De hecho, muchos ya han asumido compromisos en primera persona. El más destacado, es la separación del vidrio y el papel, algo que practican «siempre» el 83% y el 81% de los encuestados. También es muy elevado el porcentaje de vallisoletanos que asegura que apaga las luces y los aparatos eléctricos cuando no los usa. Además, el 59% dice que siempre y el 33% que casi siempre llevan a la compra sus propias bolsas, para no hacer derroche de plásticos.

Estos son, el del reciclaje y el del consumo de menos plásticos, los puntos fuertes del compromiso vallisoletano contra el cambio climático, pero hay otros indicadores en los que la ciudad no sale tan bien parada. En eficiencia energética, solo se obtiene un suficiente en el consumo de agua (el 22% dicen que solo algunas veces o nunca limitan el tiempo de ducha para ahorrar agua) o en el ahorro de calefacción (el 20% reconoce que suele tener grados de más). Además, el 35% admite que nunca o casi nunca elige frutas y verduras producidas en la comunidad, lo que reduce la contaminación derivada del transporte.

«Valladolid también aprueba en la sustitución de viejas bombillas por otras de bajo consumo, así como en la compra de electrodomésticos eficientes, pero suspende en el aislamiento de las viviendas, en el uso de la energía solar y en la conciencia de compra a las empresas altamente contaminantes», concluye el informe.

Eso sí, admiten estas medidas siempre que no afecte directamente a sus bolsillos. Así, «los vallisoletanos están de acuerdo en cambiar su modo de vida, pero l es parece mal el aumento de precios de bienes básicos, como el transporte público, la alimentación o la calefacción». Se muestran, sin embargo, más permisivos en que suban los precios de los combustibles o los electrodomésticos contaminantes si con eso se obtienen ventajas medioambientales.

La encuesta también pregunta a los vecinos de Valladolid sobre qué medidas creen que deberían asumir las administraciones para combatir el cambio climático. Los aspectos más destacados con promover el transporte público (el 88% dicen estar muy de acuerdo en esta acción) e instalar sistemas de iluminación eficientes (apoyado también de forma clara por el 88%). Le sigue con los porcentajes más altos de «muy de acuerdo» la promoción de los desplazamientos en bici (el 69%), la creación de servicios de asesoramiento sobre el ahorro y uso de energía (62%) y la restricción del uso del vehículo privado por el centro de la ciudad (57%). Menor apoyo (46%) recibe la limitación a 30 kilómetros por hora en el tráfico.

Ahora te toca a ti contestar a las preguntas.

¿Qué crees que deberían hacer las administraciones para combatir al cambio climático?

Y tú, ¿Qué haces para contribuir a ganar esta pelea?

Al final de las encuestas podrás ver qué han contestado el resto de usuarios y compararlo con los resultados del estudio elaborado por la consultora Geocyl, en colaboración con el centro tecnológico Cartif.