La Navidad no quiere entender de soledad en Valladolid

Leandro Santana Vega, aparentemente, no respondería al perfil de alguien que vive en soledad las tradicionales fechas navideñas, sin oportunidad de compartir mesa y mantel con sus más allegados. Pero la vida, en ocasiones, depara situaciones indeseadas. De 58 años y oriundo de Bilbao -donde vivían sus padres y hermana, ya fallecidos- reside desde hace dos décadas en Alaejos (Valladolid) y sus primos, que viven en el mismo municipio y con los que afirma mantener relación, «no le han llamado» para celebrar la Navidad.

Tampoco lo han hecho sus sobrinos y cuñado del País Vasco, a pesar «de hablar por teléfono con ellos varios fines de semana», dice. Parco en palabras y con la confesión añadida de que tampoco cuenta con amigos cerca, este ayudante de albañil -que ha encadenado varios trabajos con periodos de desempleo en Alaejos y comarca- ya cuenta las horas para convertirse en beneficiario del proyecto 'conVIVE', que pretende que las personas mayores del mundo rural en la provincia de Valladolid pasen la Navidad en compañía.

«Tengo muchas ganas de vivir una experiencia nueva», sostiene Leandro, quien, de paso, quiere hacer un quiebro al fantasma de la soledad. Lo hará junto otros dos hombres y una mujer como beneficiarios de una iniciativa que partió en 2017 del Área de Igualdad de Oportunidades y Servicios Sociales de la Diputación con la colaboración de 13 residencias de mayores, que prestan servicios de alojamiento -si también se solicita- y sirven las comidas, meriendas y cenas de Nochebuena, Navidad, Noche Vieja y Año Nuevo.

Las pasadas Navidades, Ana Saldaña, técnico de Animación Social del programa de Envejecimiento Activo y profesora de Leandro en los talleres formativos que la Diputación imparte en Rueda, le ofreció la posibilidad de participar en el proyecto 'conVIVE'. «Dije que no entonces a esta posibilidad porque no me apeteció, pero ahora quiero formar parte de algo desconocido totalmente para mí y compartir estos días de Navidad con los mayores de la residencia de Nava del Rey», explica a Ical Leandro.

Se desplazará los 12 kilómetros que distan desde Alaejos para comer y cenar y luego regresará a pernoctar en su domicilio. «La Diputación cubre todos los gastos del taxi que tendré que coger», indica el beneficiario, que vive actualmente de un subsidio. «A veces no es el que me correspondería percibir», se lamenta.

Mientras posa para el fotógrafo en la plaza mayor y ante la iglesia de San Pedro de Alaejos, valora mucho poder contar estos días con el calor y el cariño navideño de los residentes del centro de mayores en Nava del Rey. «La verdad es que la soledad no es buena compañera para nadie y menos cuando se van teniendo años», sostiene, al tiempo que indica que sí ha escuchado la existencia de más casos de mayores que viven solos en los pueblos y sin familiares cerca.

Sin ser muchos, ha habido residentes en la provincia que llamaron a los servicios sociales de la Diputación y se interesaron por pasar estos días navideños acompañados en residencias de mayores. «Una decena de personas lo hicieron para preguntar por este servicio, ya pidiendo información o para ofrecerse como voluntarios. Pero la demanda real nos ha puesto de manifiesto que, afortunadamente, no hay muchos mayores que pasen estos días en soledad, al menos en el medio rural», afirma Ana Saldaña, técnico de Animación Social del programa de Envejecimiento Activo.

Uno de los aspectos más importantes de esta iniciativa, más allá de los días propios de la Navidad, es el trabajo realizado mediante la reflexión sobre el fenómeno de la soledadad y la labor de sensibilización llevada a cabo con los grupos de personas mayores del programa de Envejecimiento Activo. «Así, se ha propiciado la visibilización de esta realidad y la detección de casos concretos. Además, se ha impulsado el apoyo social vecinal, valorándose esta respuesta ante el problema de la soledad como la más satisfactoria para cualquier persona, tanto en los días de Navidad como a lo largo de todo el año», relata Saldaña.

La convocatoria para ahuyentar las estadísticas que apuntan que la soledad representa un problema para alrededor de la décima parte de las personas mayores del país se ha realizado mediante la difusión los Servicios Sociales de Diputación, a través de los CEAS, y el Programa de Envejecimiento Activo. Asimismo, han recibido información y han apoyado la convocatoria los ayuntamientos de la provincia, la Sociedad de Desarrollo de Valladolid (Sodeva) y la Federación provincial de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas. La novedad de este año ha sido la información personalizada, a través de teléfono, facilitada a las personas usuarias de Teleasistencia.

Las 13 residencias solidarias de la provincia que se han adherido a la iniciativa 'conVIVE' son la residencia Virgen de los Remedios, de Pozaldez; Virgen del Carmen, de La Pedraja de Portillo; El Palacio de la Fundación Social Valentina Arévalo, de Matapozuelos; Sanitas Mayores, de Mojados; Montes Torozos, de Villanubla; Gero Vida, de Arroyo de la Encomienda; Santa Cruz, de Villalar de los Comuneros; San Antonio de Padua, de Cogeces del Monte; Reina Doña Urraca, de Fresno el Viejo; Virgen del Duero, de Tudela de Duero; Villa de Tordesillas; El Fontán, de Nava del Rey; y San José, de Santovenia de Pisuerga