La jueza pone en libertad condicional al octogenario que disparó a policías desde su ático de Valladolid
El gran deterioro físico experimentado en el centro penitenciario aconseja la medida por razones humanitarias, expone el auto
El octogenario que se parapetó en su ático y disparó con su escopeta a los policías que intentaban reducirle, José Antonio V. G., ha sido puesto en libertad condicional por orden de la jueza, aunque no podrá alojarse en su domicilio al pesar sobre él una orden de alejamiento.
El 21 de mayo pasado, el Juzgado de Instrucción 5 der Valladolid dictó orden de prisión provisional comunicada y sin fianza para el detenido, que tardó en ser trasladado al centro penitenciario por su delicado estado de salud. El hombre tuvo que ser hospitalizado el mismo día de su detención por las heridas que presentaba como resultado del fuego cruzado con los agentes y tardó varios días en ser puesto a disposición judicial por ese motivo.
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Desde la prisión de Villanbla se remitió un informe al juzgado en el que se ponía de manifiesto «el deterioro físico» sufrido por el investigado desde su internamiento. «Se trata de un interno totalmente dependiente, incapaz de ponerse de pie y que necesita ayuda para comer y moverse, además de presentar confusión temporal», expone el auto.
El detenido tendrá que residir a más de 500 metros de su domicilio, ya que se le impuso esa medida cautelar por las malas relaciones de vecindad con los residentes de su mismo bloque, que parece ser el origen del tiroteo.
