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Inmersión 'diversófica' en el Pisuerga
Ochenta niños participan en un campamento «seguro» que bucea en una historia del Valladolid del siglo XVIII
No fue fácil, pero el buzo Javier Marqués, con la ayuda del también buzo David Recio, consiguió sacar de las aguas del Pisuerga una preciada «baliza» que contenía un no menos codiciado tesoro en forma de «palo de agua» que los indios perdieron en 1789, cuando ocho tribus de todo el mundo se reunieron en Valladolid para sellar un tratado de paz, un acuerdo que se rompió al perderse en el olvido ocho preciados objetos de cada una de las tribus.
La historia, por supuesto ficticia, es el hilo conductor de un campamento de verano, organizado por la asociación Allende Mundi, con su centro de operaciones en el colegio Gonzalo de Berceo, que ha conseguido enganchar este año a ochenta niños de entre 3 y 13 años en torno a una historia con moraleja que este sábado al mediodía llevó a los pequeños a las orillas del río, bajo el puente de Poniente, donde el buzo (real) de la ultrasecreta 'asamblea diversófica mundial', rescató el último de los ocho objetos –los anteriores eran un trineo de los inuit, una estela celta...– con el fin de «volver a reunir a las ocho tribus y retomar aquel acuerdo de paz» del siglo XVIII, relatan los organizadores de una cita que, a pesar de la complicada situación, «ha logrado reunir a un montón de chicos en torno a esta aventura» y que se ha convertido no solo en una fuente de imaginación para los menores sino también en una «escuela de contención y prevención del virus» con estrictas medidas de seguridad entre los niños.