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Radar de la Avenida de Burgos.
Aumentan las denuncias por exceso de velocidad cerca de los colegios

Aumentan las denuncias por exceso de velocidad cerca de los colegios

Los radares móviles han cazado en este primer trimestre del año a 1.500 conductores

Antonio G. Encinas

Jueves, 11 de mayo 2017, 10:11

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El año comenzó en Valladolid con una serie de atropellos, especialmente en la Rondilla, que llevaron al Ayuntamiento y a la Policía Municipal a tomar algunas medidas extraordinarias para intentar atajar la epidemia. Entre ellas se propuso una campaña especial, que se desarrolló a finales de febrero y primeros de marzo, de vigilancia de la velocidad en las inmediaciones de los centros escolares. Una campaña que ha provocado, según refleja la memoria trimestral de la Policía, un aumento inusitado de las denuncias por exceso de velocidad por parte de los radares móviles.

Así, se han pasado de las 971 denuncias tramitadas en este sentido en el primer trimestre de 2016 a 1.500 en los tres primeros meses de 2017. Las ubicaciones de los radares móviles, además, hablan. En el Paseo JuanCarlos I, donde se concatenan los institutos, se han puesto 281 denuncias, lo que es casi el triple que el año anterior en el mismo periodo (65). Algo similar ha ocurrido en las inmediaciones del instituto Núñez de Arce: de las 30 denuncias del año pasado a las 119 de 2017.

Otro de los puntos habituales en los que se crean conflictos de tráfico, especialmente a la hora de entrada y salida del centro, es la Avenida de Gijón, junto a Cristo Rey. Allí el radar móvil ha detectado en tres meses 220 infracciones, por las 161 del año pasado.

Lo curioso es que este aumento brutal de las cifras de excesos de velocidad cazados por los radares móviles se ha registrado a pesar de que el número de vehículos controlados entre por los dispositivos móviles y fijos ha sido similar, e incluso menor, al del año pasado. 68.691 vehículos pasaron por delante del objetivo del radar móvil, por los 69.917 de 2017. Es decir, con 1.226 vehículos controlados menos, 529 multas más. Señal de que los detectores se han colocado en zonas en las que realmente eran necesarios.

Los fijos, mientras tanto, han sufrido una variación a la baja bastante relevante, aunque se explica en buena medida porque la cámara se cambia de ubicación y eso hace que el más multón de la ciudad, el de la Avenida de Burgos, haya rebajado sus cifras récord. De las 6.282 denuncias tramitadas en los tres primeros meses de 2016 se ha pasado a las 4.822 del pasado trimestre.

El radar de la Avenida de Burgos ha pasado de 2.871 a 2.032, mientras que el de la avenida de Madrid ha crecido desde las 986 a 2.033. Son ambos, en realidad, los reyes de la multa. Los que más cazan a conductores que pisan el acelerador en esas vías de dos carriles por sentido que, por más que parezcan invitar a darle alegría al coche, están limitadas a cincuenta por hora, como el resto del casco urbano.

Los sistemas de foto rojo que detectan si un conductor se ha saltado el semáforo también han incrementado su efectividad durante el primer trimestre. De las 389 denuncias tramitadas el año pasado a las 758 del actual. Tiene mucho que ver el colocado en la Avenida de Zamora, que el año pasado no figuraba y que este curso se ha cobrado ya a 321 conductores que se han saltado la luz roja.

Alcoholemia

Algo en lo que los conductores vallisoletanos parecen retroceder es en los controles de alcoholemia y drogas. Se han registrado más positivos a pesar de que se han efectuado menos controles, según las cifras aportadas en la memoria de la Policía Municipal. 99 alcoholemias positivas por 88 del año pasado, a pesar de que los 1.566 controles realizados suponen una disminución de 130 respecto al mismo periodo 2016.

Y eso a pesar de que la relación entre alcohol y siniestralidad queda una vez más demostrada. 60 positivos por infracciones del conductor; 18 tras accidentes con daños materiales; otros 2 después de accidentes con heridos.

Por si esto fuera poco, en el primer trimestre de 2016 se realizaron 200 controles preventivos con 18 positivos. Entre enero y marzo se han efectuado 188 controles, doce menos, y se han obtenido 19 positivos.

En la memoria también se destacan 23 diligencias trasladadas al Juzgado por maltrato físico o psicológico, además de cinco perticiones de órdenes de protección. Además se intervino en 124 ocasiones por riñas o peleas.

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