Once fuegos cercaron ayer la provincia de León, aunque la situación mejora

No llueve y esta circunstancia no ayuda. León entero se consume entre llamas. Ayer se contabilizaron once incendios en la provincia, algunos de ellos de nivel 2 y uno que había traspasado la frontera de Orense para adentrarse en El Bierzo. El panorama es deprimente en todos los frentes. No obstante, del último parte del Servicio Territorial de la Junta se desprende una mejora. Los técnicos aseguran que los fuegos «evolucionan favorablemente», aunque sigue preocupando la intensa actividad de los incendiarios.

De los once focos detectados, a última hora de ayer, muchos ya se daban por controlados. Es el caso de los incendios de Buiza (Pola de Gordón), Ferral, Balouta (Candín) y Sorbeda (Páramo del Sil). Mientras tanto, el incendio de la Reserva de la Biosfera de Ancares, uno de los más sangrantes, se redujo de nivel 2 a nivel 1. En las tareas de extinción trabajaron una dotación de la Unidad Militar de Emergencia (UME), tres cuadrillas de tierra, una máquina 'bulldozer' y una motobomba.

También de nivel 1 seguía siendo el fuego de Molinaferrera, en el que murió Aitor Lastra, aunque con evolución positiva. El incendio de Noceda de Cabrera pasó del nivel 2 al 1, aunque sigue sin controlarse. El de Arnado, extendido al Bierzo desde Orense, se mantenía activo y en Murias de Pedredo, a pocos kilómetros del de Molinaferrera, se inició a mediodía otro incendio intencionado.