Oídos, voz y motivación
Marta García Riobóo, coordinadora del Programa Incorpora de la Fundación 'la Caixa' en Castilla y León
Sábado, 30 de enero 2021, 00:16
Rebeca Adalia. Ella es uno de los engranajes que transmite fuerza, motivación y recursos entre las empresas y las entidades sociales. Su trabajo diario devuelve la esperanza a los más vulnerables. Y el salario emocional que obtiene de su profesión es incuantificable. Marta García Riobóo es una de las coordinadoras del Programa Incorpora de la Fundación 'la Caixa' en Castilla y León. Su otra mitad, Paloma Gil, completa el tándem de un equipo perfecto que trabaja día a día rompiendo las barreras del mercado laboral.
Publicidad
Ya han pasado 15 años desde que Marta se enrolara en un proyecto como este. Desde hace cinco cogió las riendas del Programa Incorpora y aunque con modestia reconoce que su trabajo es importante, asegura que es imposible alcanzar ese éxito sin la colaboración de las empresas, las 22 entidades sociales y los 59 técnicos que son cada una de las ruedas del engranaje.
Ella está al cargo de doce entidades en la comunidad. Una región que en el año 2020 ha conseguido, a través del Programa Incorpora, 1.795 puestos de trabajo para personas en situación de vulnerabilidad. Discapacitados, inmigrantes, mayores de 45 años, víctimas de violencia de género... se han abierto un hueco en el mercado laboral gracias a la colaboración de 625 empresas locales.
Los tiempos que corren no son los mejores, pero el esfuerzo realizado por personas como Marta ha sido titánico. «Nos hemos reinventado y de las dificultades hemos sacado rentabilidad», asegura. Durante la pandemia se han reconvertido para poder cumplir su objetivo: acompañar a empresas y usuarios. La atención por teléfono, a través del WhatsApp y vía 'on-line' ha sido el pan de cada día. Además, no han querido dejar atrás a nadie y también han reforzado en competencias digitales a quienes no las tenían.
Esta coordinadora del Programa Incorpora ha motivado a todo su equipo durante estos meses para no perder el rumbo. Marta es uno de esos puentes que se tienden entre la fundación, las entidades, los técnicos y los usuarios para poder trabajar en red. «Ha sido un trabajo continuo de empoderamiento. Hemos puesto en valor que nuestros esfuerzos han dado resultados», afirma.
Publicidad
Ella se ha convertido en esas personas que escuchan por primera vez a otra. Y en su ADN está escrito que en el futuro seguirá brindando ayuda para que otros solucionen sus problemas.
3€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión