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Miércoles, 11 de septiembre 2019, 15:37
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Dos cirujías, puntos y decenas de grapas para cerrar las heridas. Ese es el precio que ha tenido que pagar Pike Carlson por sobrevivir al ataque de un puma en el jardín de su casa. Esto ocurrió durante el pasado 21 de agosto, mientras Pike jugaba con su hermano en el jardín de su casa en la localidad de Bailey (Colorado, Estados Unidos).
«Intenté golpearle en el ojo», declaraba el pequeño, que se defendió con un palo. Pike opuso gran resistencia, pero aún con el arma que improvisó y sus esfuerzos por defenderse, no consiguió evitar acabar con la cabeza entre las fauces del puma.
Mientras él se defendía, su hermano fue corriendo a avisar a su padre, quien salió con un cuchillo y logró ahuyentar a la fiera. Tras el incidente, Pike había perdido mucha sangre y tenía parte de la cara desgarrada, por lo que tuvo que ser sometido a varias cirujías reconstructivas. Además, todavía está a la espera de otra operación para reparar el párpado afectado por el asalto del animal.
Tras el ataque, según informa The Denver Chanel, el puma fue capturado y sacrificado por el departamento de Parques de Colorado.
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