Salamanca, alternativa de paso en la misteriosa llegada de Greta Thunberg a Madrid

Salamanca se ha visto envuelta en la tremenda expectación que ha generado la visita de la activista Greta Thunberg a España para participar en la Cumbre del Clima que se celebra en Madrid.

A menos de 24 horas de que toque el puerto de entrada a Europa continental, hay pocas certezas sobre el tránsito por Portugal de la activista sueca de 16 años, cuya inminente aparición esta rodeada de un halo de misterio usualmente reservado a estrellas de rock.

Thunberg desembarca este martes en Lisboa, última parada antes de participar en la cumbre del clima de Madrid, rodeada de expectación mediática y política y también de rumores sobre cómo llegará hasta la capital española.

Entre rumores y cambios de última hora, la única certeza es que arribará al muelle de Santo Amaro, junto al icónico puente del 25 Abril, en algún momento a partir de las 8.00 de la mañana (hora local y GMT).

Un halo de misterio envuelve a su viaje desde Portugal. Solo se sabe que quiere que su estancia en Lisboa sea breve ya que quiere llegar a Madrid cuanto antes, y como se da por seguro que no utilizará ni coches ni autobuses, todo el mundo da por seguro que viajará en tren, aunque se le ha ofrecido un coche eléctrico desde la Junta de Extremadura.

Para llegar desde Lisboa a Madrid tiene dos opciones, y una de ellas pasa por Salamanca, el tren hotel nocturno Lusitania, que hace paradas muy cortas de madrugada en Fuentes de Oñoro, Ciudad Rodrigo y posteriormente en la capital salmantina, donde permanecerá en su estación tres breves minutos. La otra opción es tren el diurno, que atraviesa Extremadura y obliga a realizar hasta tres cambios de ferrocarril.

Al parecer, según informan algunos medios portugueses, la decisión está prácticamente tomada y Greta Thunberg habría optado ya por pasar este martes en Lisboa para desplazarse desde su estación hasta Madrid en el tren Lusitania, que parte de la capital portuguesa poco antes de las 21.:30 horas. Desde allí atravesaría buena parte de la provincia salmantina de madrugada y llegaría a la capital poco antes de la cinco de la mañana. Desde aquí, el tren se dirige a Medina del Campo, desde inicia trayecto hacía Madrid, por una vía ya electrificada, porque hasta entonces, la máquina, contradictoriamente, consume diésel