La zona básica de Riaza multiplica por once los positivos en menos de una semana

Pese a la elevada incidencia, la zona básica no figura en el mapa de la Junta de Castilla y León en nivel rojo, color que se alcanza cuando, según los criterios de la Dirección General de Salud Pública, hay sospechas de transmisión comunitaria, tal y como ocurrió hace diez días en Cantalejo y Carrascal del Río. Por el momento, en la zona básica de salud de Riaza no se tiene sospechas de que haya transmisión comunitaria y se confía en el trabajo intenso de los rastreadores para encontrar la vinculación y el origen de cada positivo. Por ello, el delegado territorial de la Junta en Segovia, José Mazarías, considera «probable» que durante las próximas horas se declare un brote en la zona.

Sin embargo, el representante de la Administración regional en la provincia considera que su declaración sería una buena noticia. «Cuando declaramos un brote, lejos de lo que la gente interpreta, que lo suele considerar como una mala noticia, es algo bueno, porque significa que se considera que no hay transmisión comunitaria, y que la tenemos controlada. Podemos seguir teniendo casos pero si están vinculados o relacionados nos deja más tranquilos que si no supiéramos de donde vienen», explica.

Así, aunque señala que la situación en la zona «preocupa» a la Junta de Castilla y León, rechaza que por el momento el confinamiento sea una opción a considerar. «La labor de los rastreadores parece que apunta a que los casos están relacionados», subraya.

Donde ya la Junta de Castilla y León ha declarado un brote activo, el décimo en la provincia de Segovia, es en la zona básica de salud de Sepúlveda. Se trata de un episodio que por el momento cuenta con 5 positivos vinculados y que mantiene a otras 16 personas en estudio. De carácter social y familiar, el alcalde de Sepúlveda, Ramón López, afirma desconocer quienes son los vecinos de la zona afectados, aunque no esconde que la declaración de un brote en la zona era algo probable debido a la cercanía con Aranda de Duero (Burgos), Cantalejo o Carrascal del Río, localidades confinadas durante las últimas semanas debido a su alta incidencia.

En el resto de la provincia destaca el paso directo de nivel verde a naranja de la zona básica de salud de Fuentesaúco de Fuentidueña al haber registrado su primer positivo en más de dos semanas (se trata de una circunstancia condicionada por la baja población que se concentra en sus pueblos). La zona básica de Carbonero el Mayor registra un nuevo positivo pero sigue en nivel verde (la única de la provincia), mientras que suman un nuevo positivo durante la última semana las zonas de Navafría y Sacramenia. El Espinar, Villacastín, Segovia Rural, San Ildefonso, Segovia I y Segovia III se mantienen sin cambios, mientras que bajan los casos en Nava de la Asunción (tras varios días de aumentos), en Cuéllar (que pasa de alerta naranja a amarilla), en Cantalejo (que tan solo registra 8 nuevos positivos en los últimos siete días) y en Segovia II (la única zona de la capital en nivel amarillo).