El galardonado periodista, que este domingo ha recibido el título de 'Matahombres de Oro' de mano de las alcaldesas de Zamarramala en la fiesta grande de las águedas, contempla «con mucha pena» la división y la crispación instaladas, porque «al corazón de Cataluña le está doliendo, pero al resto de España le duele más lo que está pasando en el corazón de Cataluña».
A sus 82 años, teme que no verá la salida al conflicto porque, a día de hoy, «no le encuentro solución». Intuye que esa salida tardará en llegar «unos años». En tono apesadumbrado, ha manifestado su deseo de que «nos olvidemos de las rencillas» en un escenario actual de fractura, con «la mitad de los ciudadanos que son catalanes y solo quieren ser catalanes y el resto de que vivimos allí tan felices con todas las vivencias españolas».
El periodista radiofónico ha pedido que «sacar la bandera española no sea un peligro ni un desdolo para los ciudadanos» que residen en Barcelona y en general en Cataluña.
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