«Queda mucho para que las mujeres sientan la noche como suya»
Pide formación en los empleados del ocio nocturno y una ciudad plenamente iluminada
El colectivo Segovia Feminista incide en la formación de los empleados del ocio nocturno y en la iluminación como tareas pendientes. «Creemos que todavía hay ... mucho que mejorar para que las mujeres puedan sentir que la noche y la fiesta también son suyas», subraya su portavoz, Natalia del Barrio, que pide para ello ir más allá del protocolo. «Se necesita una concienciación social de que las mujeres tienen derecho a salir por la noche seguras», afirma.
La portavoz habla de «micromachismos» en determinamos ambientes y considera que la parada de bus a demanda contribuye a la seguridad en la vuelta a casa. «Tienes esa sensación de inseguridad, de andar rápido. Todas hemos cogido las llaves o tenemos el teléfono en la mano. Y todavía seguimos diciendo a nuestras amigas que nos manden un mensaje cuando lleguen», hace hincapié Del Barrio.
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Entre las demandas que reivindica el movimiento feminista está una unificación de los protocolos de ocio nocturno. En este sentido, valora la forma de proceder y la gestión que se han llevado a cabo en el caso del futbolista Dani Alves. «Cada vez se ve menos, pero es necesario que los locales eviten las publicidades sexistas para atraer a la clientela», reclama.
Pide que esas normas de conducta sean difundidas y que se apliquen. «Lo más importante es que un protocolo no consiste en palabras escritas en un papel, sino que lo conozcan las personas que tienen que intervenir; uno de los éxitos de ese caso fue lo bien que funcionó la discoteca de Barcelona porque había el compromiso de contar con personal sensibilizado con lo que era una agresión sexual y contaba con espacios seguros», indica la portavoz segoviana.
El colectivo habla de los tocamientos presuntamente accidentales, «acercarse demasiado». Y que el alcohol multiplica la pesadez «aunque tú no quieras hablar con alguien». Con todo, consideran la discoteca un lugar seguro porque se suele acudir a él en grupo, «a pesar de todos estos comportamientos que no se deben consentir». El gran problema es la vuelta a casa.
Hasta el cambio el año pasado de sus farolas, la avenida de la Constitución era un punto oscuro. «La iluminación es fundamental, no solo en las calles principales, y es que hay bocacalles con poca luz», advierte Natalia del Barrio.
Por eso la formación es un aspecto clave para Segovia Feminista. «Todos tenemos amigos con los que nos hemos emborrachado y nos han llevado a casa sin abusar de nosotras», matiza. El alcohol no es una excusa. «Si se te inculca que hay comportamientos que no están bien, es menos probable que los hagas cuando estás borracho», incide la portavoz de Segovia Feminista. Del Barrio también habla del clima político como acicate. «Tenemos un Gobierno autonómico que niega cada dos por tres la violencia machista, esto hace que se cree un ambiente desfavorable a la denuncia», llama la atención.
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