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Varios niños observan el nacimiento instalado en la iglesia de San Cristóbal de Matabuena. E.N.
Los pueblos se toman muy en serio el belén

Los pueblos se toman muy en serio el belén

Martín Muñoz de las Posadas coloca figuras de 1,70 metros de altura y Matabuena amplía su instalación navideña

maría martínez

Segovia

Domingo, 8 de diciembre 2019, 12:55

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Los pueblos de la provincia ofrecen en estas fechas un singular recorrido por las distintas formas de recrear la llegada al mundo del Niño Jesús, con belenes de todos los colores y tamaños. El que luce desde hoy en la Plaza Mayor de Martín Muñoz de las Posadas es artesanal, a tamaño real, con figuras de 1,7 metros de altura, y está aderezado con chocolate y castañas

«Ha habido mucha colaboración vecinal. Toda persona a la que se lo hemos sugerido nos ha ayudado con los transportes, los paquetes de paja y algún enramado», explica Juan José Alonso Gallego, colaborador cultural del pueblo. El acto fue conducido por Benjamín Santos Sáez como reconocimiento a su corto 'Flores Rojas', seleccionado para The 3h Edition of the Expresion Art Movie Film Festival 2019.

Las figuras han sido adquiridas a artesanos, a «los artistas» de zonas maderederas de pinares, señala Alonso. Su labor ha permitido un nacimiento completo con una Virgen y un San José de alrededor de 1,70 metros de altura. «Tenemos la suerte de que la superficie de la plaza, su gran tamaño, permite que se preste como un escaparate de exposición de las figuras». Además, cuenta con la mula, el buey y algunos elementos decorativos, como un puente o la simulación del río.

Además del nacimiento, se han instalado luces y un árbol de Navidad de diez metros de altura decorado con regalos, bolas de distintos tamaños y lazos plateados, rojos y dorados. En el pueblo siempre ha sido costumbre que los quintos de cada año lo instalaran, ya que la ocasión supone un aliciente porque es la primera reunión al compás de canciones, acompañadas de pastas y licores. «Se quieren recuperar estos momentos dándoles otro carácter». Para hoy han apostado por el producto de la temporada, las castañas asadas acompañadas de un chocolate caliente para afrontar el frío de mitad de la tarde.

El pino que se ha instalado no es natural, no se ha realizado ninguna tala, es una decoración artificial. Aunque hace años se dejó de poner por falta de quintos, «prácticamente había dos o tres para realizar todas las tareas», señala Alonso Gallego, había muchas ganas de recuperar la tradición y en estas fiestas se ha logrado.Pino y belén lucen ya juntos. Con estas iniciativas, además, se esperan mantener el interés de las visitas a la localidad.

El nacimiento estará hasta después del día de Reyes. Se lleva realizando cuatro años y cada vez se intentan añadir algún elemento más para que gane en atractivo. Las figuras principales son artesanales, pero el espacio que ocupa ha sido siseñado por el personal de mantenimiento del propio Ayuntamiento, que ha ido añadiendo piezas como el molino o el pozo, y paja y enramados para generar un espacio singular.

Un trabajo muy laborioso

En Matabuena, el tradicional y «pequeño» belén de la iglesia ha ganado metros este año para conseguir uno «mucho más grande». La unión de los 140 vecinos se ha plasmado en un nacimiento más de 20 metros cuadrados atravesado por un río con un caudal de 500 litros de agua. Matabuena inauguró ayer la instalación, surgida gracias a la idea de un vecino de Madrid que suele acudir al pueblo. El alcalde, Felipe Bartolomé, explica que el hombre ofreció la posibilidad de dar un cursillo en verano sobre cómo hacer nacimientos y los vecinos aceptaron. En junio comenzaron su labor y ayer enseñaron el fruto de su trabajo.

Las casas del nacimiento han sido realizadas a mano por diez de las mujeres que acudieron a las clases, que comenzaron reuniéndose una vez a la semana. Según se acercaba la fecha, ampliaban los días como podían. «Ha sido un trabajo muy laborioso. Tiene un puente de dos metros, luces... Es muy digno de ver».

El belén está situado en la iglesia de San Cristóbal y montar las más de 50 figuras les ha llevado cinco días de trabajo. «Una labor impresionante», señala el alcalde. El portal está hecho con poliespan y los tejados con ramitas. Aunque alguna de las figuras son compradas, otras provienen de los vecinos. «Todo el pueblo ha colaborado, pero en especial las mujeres, que son las que realizaron el cursillo para desarrollarlo todo. Siempre se vuelcan en todo, pero en este caso mucho más. Son muy participativas», elogia Bartolomé.

Excepto las figuras, todo el trabajo ha sido realizado a mano. El esfuerzo y el nivel «tan bueno» que han logrado les ha animado a participar en el 30º Concurso Provincial de Belenes de la Diputación de Segovia, creado para fomentar la convivencia y la comunicación entre los pueblos. Contará con tres categorías: Escolar, Popular y de Exhibición. En una primera fase, seleccionarán cuatro belenes por cada Centro Agrupado en Acción Social y por categoría. Estos serán los que pasen a la segunda ronda provincial, de la que saldrán los ganadores. «A mí me encanta nuestro belén. Espero que ganemos», dice el alcalde.

Las visitas comienzan el día 13 con un horario de siete a nueve de la tarde. Además, va a estar abierto durante las misas de los fines de semana. En cualquier caso, habrá flexibilidad para mostrar el montaje a cualquiera que lo pida. El día de Reyes será cuando lo retiren.

El alcalde confía en que a todo el mundo «le va a encantar» porque considera que es impresionante «para lo que es el pueblo, un lugar pequeño con poco presupuesto». Recalca que «esto no es Madrid o Segovia, donde se puede pagar a alguien para hacerlo. Todo se lo debemos al gran trabajo de las mujeres».

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