El PSOE fía su oposición municipal a la experiencia como alcaldesa de Clara Martín

Las aguas en el PSOE de Segovia bajan revueltas. Desde el inicio del anterior mandato las perspectivas electorales ya eran pesimistas, aunque en ningún caso esperaban un golpe como ha sido bajar de diez a siete concejales. La fórmula escogida para la sucesión de Clara Luquero no ha funcionado como sí que lo hizo en 2015 con el relevo de Pedro Arahuetes y por ello hay voces dentro de la formación que piden tomar decisiones, tanto en la agrupación de la capital como en el partido a nivel provincial.

La candidata del PSOE y todavía alcaldesa en funciones, Clara Martín, se ha mantenido esta semana en un segundo plano. Su agenda municipal apenas ha tenido actos oficiales y la tradicional comparecencia ante los medios de comunicación después de la junta de gobierno local de los jueves ha quedado suspendida. Martín ha salido del foco mediático pero tan solo de manera temporal. Su intención no es, por el momento, dar un paso atrás. Ya lo señaló la misma noche electoral, en la que anunció que continuaría como líder del Partido Socialista en el Ayuntamiento de Segovia.

La extraña situación de ver a una alcaldesa pasar a la oposición (será la primera vez que ocurra este siglo en Segovia) será precisamente uno de los puntos que Martín intentará aprovechar para intentar ganarse la confianza de los segovianos. La todavía regidora de la ciudad espera que su conocimiento de la gestión del Ayuntamiento de Segovia sea un activo importante en la oposición al gobierno de José Mazarías.

No es su única baza. El PSOE también insistirá en un argumento que ya han utilizado durante la campaña electoral: la imposibilidad de que José Mazarías pueda cumplir con el programa de gobierno que ha prometido. Los socialistas están convencidos de que un buen número de las promesas del futuro alcalde no serán realidad y centrarán su oposición en ello.